sábado, 21 de enero de 2023

“Buen fin y mejor principio"

En Abu Dhabi (Emiratos Árabes) Racing volvió a competir frente a Boca por la recientemente creada Supercopa Internacional y al igual que en San Luis volvió a ganarla por el mismo resultado.

Antes de referirme al partido quiero decir que Racing no tiene la culpa de que la AFA haya designado otra vez a Rappallini, tampoco es quien redactó el reglamento que modificó el tema de las manos en el área y menos de que el VAR haya coincidido en la sanción.

Respecto al encuentro, Racing jugó mejor que Boca, tuvo mejores chances e hizo que Javier  García se convirtiera en figura, por lo que considero que fue un justo ganador.

Racing comenzó dando ventajas por la zona de Pillud especialmente a través d Villa y Fabra lo que no eran tomados correctamente y desde allí generaban algunos centros que podían ser peligrosos,  como el que a los 17 minutos envió Briasco y terminó en gol de Roncaglia, pero al igual que en el partido anterior, dos minutos después Racing logra el empate cuando Maxi Morales ubica un gran pase para Carbonero, el mejor jugador del partido, quien superando en velocidad a los defensores define con gran clase ante la salida de García.

A partir de allí el equipo se fue adueñando de la pelota y a través de Sigali, Moreno e Insúa comenzó a asegurarla, buscando alternadamente a Pillud o a Piovi por los laterales a al gran “chiquito” Moralez que aportaba inteligencia para moverse y claridad en sus asistencias, en un medio campo que además contaba con el recién incorporado Nardoni, un jugador que quizás no sea el que nos entregue acciones exquisitas, pero le da la dinámica y el cambio de ritmo que esa zona venía necesitando y con Oroz que con sus movimientos interiores participaba más del juego.

Racing comenzó a tener situaciones, aunque Romero –obviamente muy distinto a Copetti- al no ser buscado tuvo que trabajar más en desplazamientos de distracción porque el juego estaba destinado más a un encendido e imparable Carbonero, quien con sus movimientos, gambeta, enganche, freno y velocidad parecía indescifrable para toda la defensa boquense se convertía en la mejor arma ofensiva y en el jugador que tuvo todas las chances para aumentar, como a los 32 con un gran remate y a los 40 de tiro libre, pero García respondió bien a los mismos.

Racing terminó siendo superior a un Boca que en esa primera etapa solo aspiraba a alguna pelota parada ya sea de tiro libre o córner, para llevar peligro al arco defendido por Arias, quien realmente no fue requerido como si lo hizo el arquero rival.

En el segundo tiempo Boca saca un delantero y ubica un volante más para tratar de sacarle la pelota a Racing y si bien equilibró un poco el trámite no llegaba al arco académico por lo que su único camino era una pelota parada.

Racing nunca abandonó su idea y viendo que su rival dejaba espacios encontraba la manera de llegar, intentó Oroz con un remate a las manos del arquero, con Romero en una pelota larga donde García estuvo a punto de hacerle penal y en un fuerte remate de Moreno desde afuera del área exigió al arquero, que ya era lo mejor del rival.

El cansancio se hacía presente y llegaron los cambios de Hauche por Oroz y Jonathan Gómez por Nardoni y comenzaron tener influencia en el juego, como a los 34 minutos cuando Sigali en gran arranque rompe líneas y cerca del área toca para Gómez y este la pone dentro del área para el picante Carbonero quien elude a García pero no puede frenarse y su toque final sale desviado, cuando todos gritábamos el segundo gol.

El tiempo de descuento nos hizo pensar que se venía el alargue, pero no fue así porque después de una serie de toques Maxi Moralez asiste a Carbonero dentro del área, su disparo se desvía en Advíncula y sale hacia la derecha del arco donde va a buscarla J. Gómez quien remata pero Sández va a cruzar al suelo y la pelota pega en la mano separada del cuerpo y entonces faltando dos minutos ¡penal! para Racing.

La locura estaba desatada una vez más, el festejo de todo Racing y su gente se mezclaba con la desesperación de los jugadores de Boca quienes en una acalorada discusión ante Rapallini trataban de dar vuelta la sanción para no volver a caer ante sus angustiados hinchas, derrotados nuevamente por quien ya les había ganado la última Copa del año anterior.

En el mientras tanto, por lo menos en mi caso, el penal para Racing después de lo de Galván pasó a tener cierto dramatismo y sumado a que a Moralez en el amistoso le habían atajado uno, esperaba ansioso quien iba a tomar la pelota, hasta que Piovi asumió la responsabilidad y esta vez  sí, “le rompió el arco” y entonces todo fue alegría.

Racing ganando la Copa de Campeones a fines del 2022 y la Supercopa Internacional a comienzos del 2023, logro hacer realidad ese deseo de todos los hinchas académicos de tener un “buen fin y mejor principio”.

Vamos Racing Carajo!

Hasta pronto.