jueves, 26 de enero de 2012



Un dolor de muelas con efecto dominó.



La falta de profesionalismo de algunos jugadores llama la atención. No puede aceptarse que una persona como Toranzo –quien no es ningún chico y de quien se supone tiene algún grado importante de inteligencia- no haya tenido en cuenta para bien de su salud el problema suscitado en su boca que le ocasionó a él una importante infección y un dolor de cabeza al”Coco” Basile, ya que según las palabras del preparador físico Sr. Dibos no estará listo para comenzar el torneo.



También es inaudito que el departamento médico de Racing no haya tomado injerencia en el tema obligando a Toranzo a concurrir al odontólogo ya que según informaciones su problema data desde hace unos dos años. Si no es el odontólogo que sugiere o recomienda el médico, por lo menos que sea aquel en el que confía el jugador. Toranzo es patrimonio del Club y debe aceptar lo que los responsables médicos ordenan - a pesar de sus miedos o distintos puntos de vista- y si tiene alguna duda se podrían realizar ínter consultas con otros especialistas.



He tenido oportunidad en los años ochenta de hablar con un profesional bioquímico que había participado de diversos estudios realizados a una Selección Juvenil Argentina y hablando sobre el tema, entre otras cosas me comentó que algunos jugadores tenían la boca llena de caries y los problemas que esos focos de infección le traían a su físico ( fundamentalmente renales ).



Quiero creer que 30 años después se le realizan anualmente exámenes bucales a los planteles -sobre todo a los chicos de inferiores- ya que es fundamental contar además de una vida sana en cuanto a alimentación, descanso y entrenamiento, con una dentadura en perfectas condiciones para evitar problemas urológicos y musculares a futuro.



Este fue un dolor de muelas con efecto dominó ya que afectó a más de una persona pero sirvió para encender la alarma que espero le hayan prestado atención jugadores, médicos, cuerpo técnico y dirigentes, caso contrario el club estaría descuidando su patrimonio.



Hasta pronto.