domingo, 17 de abril de 2022

La fuerza de la convicción en la idea lleva a los grandes logros.

La mente juega un papel esencial en todos los aspectos de la vida y en los deportes de competencia, el estado de ánimo es el que muchas veces decide el resultado de un partido.

Y este Racing que tiempo atrás se encontraba dentro de un mar de dudas, invadido por la desconfianza y la indecisión, que lo llevaban a jugar con temor, hoy ha pasado a ser un equipo seguro, confiable, convencido de sus cualidades, que sabe a qué juega y que cuando pierde el dominio del encuentro responde con carácter para volver a poner en práctica la idea de juego que ya es como un sello distintivo.

Todo esto es mérito de Fernando Gago, quien con paciencia y convicción ha persuadido de que hay una forma, una manera de jugar, una idea con la cual se podía crecer y competir de igual a igual en todos los frentes.

Con argumentos y razones válidas fue dándole elementos y herramientas a los jugadores, que los llevaron a recuperar la confianza en sí mismos y a ir asimilando cada vez mejor los conceptos que encerraba la idea del técnico. 

Y anoche una vez más, pudimos ver reflejada la misma en un Racing que desde el vamos buscó adueñarse del trámite, obligando a su rival a pensar más en defender que atacar.

Comenzó como acelerado y fallando en algunos pases, pero a los pocos minutos se fue acomodando y tranquilizando y al duro Unión de Santa Fe le fue planteando un partido intenso, que no solo no los dejaba pensar sino que no podían sostener la pelota cuando se hacían de la misma, ya que era rápidamente recuperada por los jugadores Racing.

Fabricio por derecha, en idéntica posición que ante Cuiaba y Chancalay, muy recuperado por la izquierda, buscaban con sus gambetas superar a sus marcadores para encontrar a un Copetti, que cada vez juega mejor, que sigue con su racha goleadora y que además colabora en la recuperación con una entrega admirable.

Mura y Mena a acompañaban pero en menor medida que otros partidos mientras Miranda, era el gran conductor del juego, con sus llegadas al área, Moreno, era el dueño del centro de la cancha con una tarea titánica de corte y juego y Alcaraz, un poco enredado a veces demoraba cuando debía tocar más rápido.

Todos respaldados por la seguridad del muy buen nivel de “Chila” Gómez, de la excelente tarea de Sigali y del cada vez más solido Insúa.

Y Racing fue teniendo oportunidades para abrir el marcador, avisó Copetti a los 12 minutos pero era offside, a los 19 minutos convirtió luego de una gran jugada y un pase de Chancalay, pero se lo anularon por VAR, pero finalmente llegó el que le dio el triunfo a Racing, cuando a los 26 minutos, Moreno recupera cerca de área de Unión, habilita a Fabricio Domínguez sobre la derecha y su remate cruzado lo encuentra el siempre atento Copetti sobre la izquierda y lo desvía al gol.

Racing siguió buscando y una gran jugada de Chancalay sobre la izquierda termina en un centro que finalmente recibe Miranda, pero su disparo es desviado por el arquero rival.

El segundo tiempo fue un poco más parejo, dado que Unión salió a pelear el partido más arriba y algunos jugadores académicos acusaban cierto cansancio así y todo lo tuvo Alcaraz y también Miranda, pero a los remates de ambos respondió bien el arquero Mele.

A los 14 Fabricio Domínguez le deja su lugar a Cardona, lo que obliga a enviar a Chancalay a la derecha, un cambio que llevó a Racing a jugar de otra manera porque estacionando sobre la izquierda era controlado fácilmente por los defensores de Unión, que lo obligaban a tocar corto o hacia atrás y eso lo hacía entrar muy poco en juego.

Con todo respeto, considero que al colombiano hay que buscarle una ubicación que le permita estar más en contacto con la pelota, porque no puede pasar desapercibido un jugador de su categoría, quien debería hacerse cargo del partido junto a Miranda, pero para ello necesita tener más movimiento y estar en contacto con la pelota en forma continua, por lo que creo que debería trabajar detrás del punta porque inteligencia, buen pie y remate le sobra. (En un momento del encuentro el comentarista dijo que Miranda consultó a Gago sobre el cambio de posición entre ellos).

Pero todo siguió igual y a los 27 minutos Nery Domínguez entra por Alcaraz y Piovi por Mena, pero Racing ya no encontraba los caminos para llegar claro al gol y a los 88 minutos Copetti le deja su lugar a Rojas y Moreno a Jonathan Gómez.

El partido estaba controlado, pero un solo gol de diferencia nunca asegura el resultado y Unión aportando más delanteros buscaba a través de pelotas largas o paradas, la posibilidad de encontrar el empate, que casi se les da sin merecerlo sobre el final, pero estuvo como siempre muy atento “Chila” Gómez.

Un nuevo y justo triunfo de un Racing que juega sabiendo que la fuerza de la convicción en la idea lleva a los grandes logros y lo está demostrando en cada partido, donde a través de su juego, el equipo sigue exhibiendo la nueva e inconfundible identidad que le ha dado Gago, esa que nos permite disfrutar y deleitarnos cada vez que lo vemos.

Hasta pronto.