lunes, 30 de mayo de 2016

Cuando no te quieren, es difícil que la relación tenga futuro.


Aunque hayan confirmado a Sava en el cargo, pienso que todo se ha dado con un final triste para ambas partes, porque no creo se hayan ido seguros y felices con el acuerdo.

Digo esto guiándome por las declaraciones previas a la reunión del viernes, tanto de Sava como de Víctor Blanco, donde el técnico, que se iba enterando por los medios de su posible salida, se defendía como podía y el presidente, que buscaba ocultar su decisión de prescindir del mismo, no entregaba otra respuesta que la reiterada evaluación.

Idas y vueltas de algo, que debió de haberse tratado en privado mucho tiempo antes, enfrentando la realidad con la verdad, pero nada se puede construir seriamente si en lugar de buscar el diálogo se lo evita y se habla de los problemas por otros carriles, tal como lo aseguraban las informaciones de los periodistas partidarios y también la de los otros medios que cubren Racing, donde el final ubicaba a Facundo Sava fuera de Racing, 

Pero evidentemente algo pasó camino de la reunión, para que en la misma cambiara todo tan radicalmente y donde seguramente se entrecruzaron mentiras y verdades, Sava logró continuar en su cargo, pero sabe mejor que nadie que el mismo está atado con débiles hilos que se romperán al primer paso en falso, motivo por el que quizás, Sava debería de haber renunciado, porque como en cualquier circunstancia de la vida, cuando no te quieren, es difícil que la relación tenga futuro.

Pero ahora hay que tirar para adelante, como siempre lo hicimos los hinchas de Racing, por lo que solo nos resta alentar como siempre, deseándole lo mejor al “Colorado”, para que le encuentre la vuelta al equipo, para que el plantel se despoje de las dudas y pueda ganar en confianza,  para que esta CD no tenga que tomar decisiones como la de aquellos años, donde los técnicos nunca terminaban su mandato y para que los hinchas podamos volver a ser felices, viendo un Racing protagonista que sabe a lo que juega.

Hasta pronto. 

jueves, 26 de mayo de 2016

Entre coherencias y contradicciones.


Días tumultuosos se viven en Racing, porque pareciera que, por distintos motivos, se comienza a derrumbar lo que tanto costo edificar y eso no es bueno.

Desde mi punto de vista y haciéndome eco de lo que comentan los periodistas (sobre todo los de las audiciones partidarias) se está desandando el camino que tanto costó transitar y como hincha tengo miedo de que volvamos a los tiempos donde todo era más incertidumbre que certeza.

Pero a mi modesto entender, todo pasó entre coherencias y contradicciones, es decir, entre decisiones razonables y absurdas.

Entre las coherentes, si se quiere inteligentes, por más que nos duela, ubico el retiro de Diego Milito, del que ya expresé todo mi sentimiento y que tiene mucho sentido porque el desgaste físico (la lesión de su rodilla) lo ha llevado a realizar un esfuerzo muy grande para poder de alguna manera continuar participando profesionalmente como jugador.

Y también la decisión de Saja, que era un  secreto a voces y que el mismo hoy hizo público, porque si bien no manifiesta que deja el fútbol activo, expresó que no renovaría su contrato con Racing y aunque el club pierde un gran jugador y el plantel uno de sus más importantes referentes, todos sabemos que el destino depara situaciones que uno no espera y el fútbol le puede jugar una mala pasada, por lo que en poco tiempo perdería todo lo logrado durante sus cinco años, sabiendo que los hinchas muchas veces somos exitistas.

En las contradicciones ubico el tema de Sava, quien aparentemente ya estaría fuera de Racing.

Haciendo un poco de memoria digamos que la dirigencia de Racing contrató un técnico que realmente no era su prioridad y que lo que le daba cierto crédito fue su última etapa en Quilmes donde tuvo una gran racha de triunfos, sumándole además su conocido fanatismo por Racing, porque en sus equipos anteriores, creo que nunca pudo completar un torneo (Hablo de San Martín de San Juan, Unión y O’Higgins de Rancagua).

Por lo tanto si, como pasa con muchos jugadores, para los dirigentes era solo una apuesta, me parece que no se dieron cuenta de lo mucho que se jugaba Racing en estos primeros meses del año, lo que evidentemente fue desde el vamos, un error de parte de la CD.

Por tal motivo y a pesar de no haber logrado algo realmente importante en este semestre, me preocupa la sinrazón de los dirigentes al generar desde hace varios días, un clima de incertidumbre sobre su continuidad, incluso a sabiendas de que Milito y Saja, jugadores que el presidente dice escuchar con atención, habían hecho público su apoyo al técnico.

Por último siento que este año, un mar de dudas envolvió a Racing, desde las dudas de la CD en la elección del técnico, las dudas de Sava en el sistema de juego, de las que nunca pudo despojarse y finalmente las dudas de Blanco sobre si renovarle o no.

Ayer se ganó un partido importante, que siempre manifesté son como pequeñas finales que van creciendo, para justamente dar por terminada una etapa que a los hinchas nos dejó más tristeza que alegrías, pero ya sin Milito y sin Saja, la vida de Racing continúa y nosotros seguiremos como siempre apoyando a todos los jugadores que sepan defender con profesionalidad y orgullo la camiseta de Racing.

Hasta pronto





domingo, 22 de mayo de 2016

La emoción no tuvo límites.


Tengo 73 años y no recuerdo en Racing demostración de amor similar o parecido para la despedida de un jugador como la que hoy se pudo ver en el Cilindro.

Evidentemente esto no es casualidad, es fruto de todo lo que transmitió Diego Milito durante estos últimos dos años, un ídolo infinitamente positivo porque reúne todas las condiciones humanas y profesionales, requisitos que tanto, dirigentes, jugadores e hinchas hemos sabido apreciar.

De allí esta muestra inequívoca de amor para con su máximo ídolo, puesta de manifiesto por parte de todos los hinchas que hoy llenaron el Cilindro, quienes le ofrecieron al “Príncipe” la confirmación de ese sentimiento tan particular que la gente tiene por él y que hace vibrar a cualquier ser humano.

Espectacular recibimiento y merecido tributo para quien, sin duda alguna, se ha convertido en el mayo ídolo de la historia racinguista y su devolución llena de lágrimas expresa su amor por la gente de Racing.

La exaltación de su nombre por parte del hincha la recibió a flor de piel desde el minuto uno, donde el amor tuvo  un ida y vuelta entre la gente y su ídolo, que fue creciendo hasta el final del encuentro, donde ahí sí, la emoción no tuvo límites y las lágrimas fueron el común denominador de ese sentimiento, en los ojos llorosos de  Milito, de los hinchas y de sus compañeros, especialmente graficados en el sentido y sincero llanto de Saja, quienes sin vergüenza demostraron su identificación con el gran capitán brindándole afectuosos y calurosos abrazos.

Espero que la pérdida de Milito como jugador y compañero no se sienta tanto y el plantel pueda continuar con ese espíritu ganador, porque la vida en Racing sigue, mientras los hinchas esperamos en que función volverá nuestro ídolo en el futuro, pero sea manager, técnico o presidente, los hinchas deberemos confiar en él por el tiempo que sea, porque posee una de las condiciones más importantes además de su capacidad, para desarrollar cualquiera de esas tareas y que son su honestidad y transparencia. 

Ah, el partido…, sí, ganó Racing 2 a 0 y Milito pudo convertir para llegar a los 22 goles, pero la verdad es que hoy emocionó el amor recíproco del hincha de Racing con su ídolo.


Hasta pronto

miércoles, 18 de mayo de 2016

Diego Milito nació para ser líder.


La salida de Milito implica la pérdida no solo de un gran jugador, de un ganador, de un referente, de un hincha de Racing, sino la de una persona que llegó para liderar un plantel, inculcándoles con su ejemplo y desde el respeto, las premisas más importantes donde conjugan las exigentes obligaciones profesionales y la sana competencia interna, que como resultado de la misma confluyen en una buena convivencia, facetas esenciales para poder aspirar al éxito deportivo.

Creo que Milito tuvo mucho que ver con el crecimiento de algunos jugadores y con todo ese derrotero donde Racing fue creciendo como equipo ganador hasta consagrarse campeón, porque él fue sin lugar a dudas, el guía que llevó por el camino indicado a un plantel sumamente competitivo, donde todos sabemos los egos salen a luz rápidamente.

Su transparencia como persona, su palabra precisa, su entrega profesional y fundamentalmente su claridad en todos sus actos, nunca le dieron lugar a que hubiera una mirada de disconformidad de parte de sus compañeros, aún en su momento más brillante cuando se logra el campeonato del 2014, donde, quizás desbordado por el amor de los hinchas, podría haberse adjudicado la gloria y no fue así, por eso hoy sale a flote el dolor que sienten los jugadores del plantel de perderlo como compañero, pero fundamentalmente porque los potenciaba y los contenía, estando en cancha o en el banco.

Contrariamente al decir popular (que expresa que un líder “se hace”), considero que la capacidad de liderar no se aprende, se trae en los genes, solo que esa persona lo saca a relucir cuando la oportunidad lo amerita, por eso pienso que Diego Milito nació para ser líder, porque arriesgando su prestigio y trayectoria, decidió volver a Racing en un momento difícil para ayudar a armar un plantel que pudiera ilusionar a todos los hinchas y se puso al frente con una comunicación que buscó integrar a todos, sin egoísmo y sin soberbia, luchando y se esforzándose desde el vamos como uno más junto a sus compañeros, buscando siempre ser verdadero, aún en los momentos más difíciles.

No será fácil para un plantel que creció de golpe a su lado encontrar su sucesor, aun contando con jugadores como Saja, Aued, Lollo e Ibañez, que tuvieron su cuota parte de importancia en estos últimos años, pero sería interesante que pudiera ocupar ese lugar, alguien con idéntico sentido de pertenencia al de Milito y creo que Lisandro López, que tiene raíces originales, puede lograrlo, porque seguramente con otro perfil comunicativo, posee virtudes que pueden llevarlo a tomar el liderazgo que deja el “Príncipe”.

Como hincha me entristece este momento, porque hay personas que uno desea que no se retiren nunca, por todo lo que transmiten, por eso sería muy valioso, que Milito pudiera continuar ligado al club y al plantel, obviamente desde otra función profesional, aportando toda su sabiduría y experiencia, para que Racing siga creciendo.


Hasta pronto

sábado, 14 de mayo de 2016

Sin objetivos, sin actitud y sin hambre de gloria.


No se si Sava se tiene que ir o no, porque hay mucho de verdad y mucho de mentira en toda evaluación en un tiempo relativamente corto, pero como decía en mi nota anterior siento cierta decepción porque esperaba mucho más de él con este gran plantel.

Aunque, sinceramente no me sorprendió que Racing jugara este partido como desorientado, porque el golpe de quedar afuera de los dos objetivos no es sencillo de digerir, por más caras simpáticas y palabras grandilocuentes que salgan de boca de los jugadores y del técnico.

Esto nos llevó a ver a un Racing desconcentrado, que ya sin objetivos, sin actitud y sin hambre de gloria, fue superado durante casi todo el partido y obligado a jugar al pelotazo, porque no tenía la mínima posibilidad de generar una jugada, por lo menos  hasta después del segundo gol del local.

Racing fue superado en todos los sectores y se pudo observar a sus jugadores totalmente  dispersos, aislados, todo lo contrario de lo que sucedía con los de Defensa y Justicia, quienes se desdoblaban en defensa y ataque, presionaban cuando un jugador académico recibía la pelota y disputaban la misma como si fuera la última.

Así y todo creo que Sánchez y Cabral no estaban tan mal, pero debían prácticamente solos enfrentar a los delanteros y volantes rivales, porque los marcadores de punta y los volantes, salvo Acuña, no recuperaban y entonces el aluvión era permanente, aunque gracias a Dios, el primer tiempo no comprometieron tanto a Saja.

En la segunda parte Racing reemplazó a un pálido Noir con Romero, al que le cometieron frecuentes infracciones que Laverni no cobró, (tiene un reglamento propio) para darle un poco de pausa al juego y asegurar más la pelota aunque nunca pudo hacerse dueño del partido y de alguna manera siguió sufriendo de la misma forma.

Seguía mostrando una llamativa lentitud mental en las decisiones y falta de reacción para tratar de  hilvanar alguna jugada que le permita poner en situación de gol a Lisandro y Milito, quienes seguían absorbidos por las férreas marcas de un equipo que tuvo gran dinámica y jugó muy bien porque supo a que jugar.

Solo quedaba la esperanza de un buen lanzamiento de Romero, como sucedió en el gol que Bou concreta para el descuento, cuando ya estábamos dos a cero abajo.

A partir de allí Racing es como que tomó un poco de impulso, también permitido por un retroceso natural de su rival y tuvo la posibilidad del empate si Laverni hubiera concedido el penal que reclamó Milito.

Sobre los cambios me alegro que Bou haya vuelto a convertir y sigo preguntándome porque no se le da a Pereyra una oportunidad de estar más tiempo en cancha y no faltando solo 5 minutos.

Hasta pronto



domingo, 8 de mayo de 2016

Más que fracaso, decepción.


Con referencia al partido de anoche frente a Estudiantes, considero que Racing debió ganarlo con claridad, por las oportunidades de gol, por los tiros en los palos y por el penal que el árbitro no le concede, pero desde mi punto de vista digo que no me parecen acertadas algunas decisiones de Sava, como la entrada de Gustavo Bou, quien realmente no aporta ninguna de las facetas que lo llevaron a ser el mejor delantero, cuando debería pienso, haber enviado a la cancha a Pereyra, por su nivel actual y además por el plus de haber sido jugador de Gimnasia y Esgrima, jugador que quedó en el banco y por lo menos debió haber entrado por algún defensor cuando la Gata Fernández es reemplazado en el equipo platense, como así también quiero creer que lo de Noir, sobre el final del partido fue, porque Vittor estaba lesionado.

Lamentablemente los objetivos de este primer semestre ya están perdidos y considero que la campaña que realizó el equipo al mando de Sava, no fue ni del todo mala, ni del todo buena, por eso siento más que fracaso, decepción, por el sueño, por la ilusión, por la expectativa que me generaba este plantel, al que ahora solo le queda cumplir con los dos partidos restantes, los que sería importante ganar para darle un marco más feliz a la despedida de Diego Milito, nuestro ídolo, en sus dos capítulos finales de su carrera como jugador profesional.

No tengo dudas que Sava sufre tanto como el hincha de Racing, primero porque es un hincha más y segundo por todo lo que se esforzó y dejó de lado para llegar a dirigirlo, como decía en mi última nota de diciembre pasado donde hice referencia a que su amor por Racing fue más fuerte para llegar a ser su técnico, pero también expresé que no podíamos quedarnos solamente en ese gesto ya que en oportunidades anteriores hubo otros técnicos tan hinchas de Racing como él y tampoco pudieron realizar una buena campaña (léase Costas y Quiroz), con el atenuante de que no contaban con un plantel del nivel actual, ni con el buen momento económico que vive el club hoy, algo que sí recibió el “Colorado” Sava.

Creo, y como digo siempre con respeto y solo desde la mirada de un hincha, que su camino lo transitó cargado de una gran duda, que nunca lo abandonó y que estuvo en no saber si aplicar su impronta ofensiva que le impuso a sus equipos anteriores o jugar sin arriesgar, algo que se supone es contra natura a sus ideas originales, pero que pareciera que la Copa Libertadores lleva a muchos técnicos a ir en contra de ellas.

Es evidente que Racing no es Quilmes, ni Unión ni San Martín de San Juan, con el debido respeto que me merecen estas instituciones y las responsabilidades que nuestro equipo exige, muchas veces confunden hasta los más preparados, a pesar de contar con uno de los mejores planteles de la argentina, sino el mejor.

Hasta ahora creo que nadie pone en duda de la entrega del plantel y del respeto del mismo hacia el cuerpo técnico, pero va a ser fundamental que Sava para la próxima etapa y después de haber conocido a fondo a todos sus integrantes, tome decisiones acertadas para decidir que jugadores se quedan y quienes se incorporan, para definitivamente encontrar un sistema que le dé al equipo una idea de juego consolidada.


Hasta pronto.


jueves, 5 de mayo de 2016

Un muy buen partido con un muy mal resultado.


No es sencillo aceptar quedarse afuera de la Libertadores después de ver que Racing podía haber superado en los dos encuentros al Mineiro, porque en Avellaneda fue superior y nos anularon un gol legítimo y el de anoche porque el equipo jugó uno de sus mejores encuentros de la era Sava, de visitante y en un estadio que era una caldera.

Pienso que la mayoría, entre los que me incluyo, esperaba que Racing se refugiara especulando con un contragolpe, pero gratamente vimos como el equipo se plantó en la cancha para adueñarse del partido y así fue, porque a pesar del gol de Mineiro a los 15 minutos, Racing fue a buscar el empate que llegó 5 minutos más tarde, de la mano de Lisandro López, de excelente partido, cuando realiza una gran jugada individual que finaliza en penal y el mismo convierte.

Racing seguía dominando a un Mineiro que solo buscaba a Pratto, el jugador que podía cambiar la historia, pero aunque tuvo alguna, prácticamente no inquietó a Ibañez y todo esto nos generaba una gran ilusión, porque se veía que el partido estaba controlado.

La segunda etapa comenzó con Racing ordenado y con un Mineiro que era evidente iba con todo a buscar el triunfo y casi lo consigue cuando un remate de Pratto pega en el ángulo derecho de Ibañez, pica afuera de la línea y sale hacia la izquierda, para que Robinho termine cabeceando desviado.

Parecía que la suerte estaba de nuestro lado y como decimos los hinchas, si no entró esa no nos ganan más y Racing respondió inmediatamente con Romero sobre la izquierda pero su disparo fue bien desviado por el arquero Victor.

Luego un cambio que puede ser correcto por su idea, pero que le dio al equipo brasilero un plus más para comenzar a tener hegemonía en la mitad de cancha, porque aunque si bien es cierto que Romero no estaba haciendo un gran partido, era el que junto con Aued, que jugó en gran forma eran los que generaban un juego más claro y ahora el esfuerzo iba a ser aún mayor, porque se sostenía menos la pelota.

Llamó la atención la falta de Roger Martínez en el banco y la entrada de Bou, porque una cosa es “La Pantera” al cien por ciento y otra es sin desmerecerlo ni negar todo lo que nos dió, un Bou lleno de problemas y lesiones sumado a un largo tiempo sin jugar.

Racing seguía desgastándose,  la entrega era enorme y un ejemplo de ello fue Acuña, también de gran partido quien en otra buena jugada individual , ubica un centro que Lisandro conecta pero nuevamente el arquero responde bien.

El cansancio se veía y quizás esto lo llevó a cometer faltas que le daban a Mineiro la posibilidad de la pelota parada y donde su goleador se siente a sus anchas y a los 21 minutos, Pratto, aprovecha en un tiro libre la débil marca de Pillud, (cuando debería haber ido Sánchez o Vittor) más las dudas de Ibañez para convertir, quien creo tuvo su cuota parte de responsabilidad en los dos goles (esto lo digo con respeto y aceptando que después ataja un penal fundamental que le siguió dando vida a Racing)

Racing sintió el golpe del gol, pero siguió luchando y Lisandro deja a Bou solo en la puerta del área grande pero su remate tomo altura y se fue desviado.

Después entró Milito por Noir, pero ya había un poco de desorden y desesperación y esto hacía que la entrada de Diego no pudiera cambiar demasiado el panorama, mientras que Mineiro ya encontraba más espacios para su contra.

Encima el penal cobrado increíblemente a un Sánchez de espaldas, pero como decía antes Ibañez atajó de gran forma y Sava buscó una cuota de agresividad con Pereyra por Acuña, pero en ese ida y vuelta como hubo una más para Racing también se le presentó otra para Mineiro, que tapa bien Ibañez.

Fue un muy buen partido con un muy mal resultado, el que le puso fin a la participación de Racing en la Copa Libertadores, lo que a los hinchas nos dolió y mucho, porque este plantel nos había ilusionado como para aspirar a más.

Ahora viene la etapa más dura para Sava y los dirigentes, porque habrá que saber como moverse y que destino darle a muchos de los jugadores porque las competiciones para el futuro no creo que permitan sostener esta cantidad de jugadores, pero Racing no debe destruir un plantel que ha sido señalado como uno de los mejores, sino el mejor, del fútbol  argentino.

Seguramente vamos a extrañar al “Principe” por su ascendencia, su calidad de jugador, su seriedad, su profesionalidad, su liderazgo y su amor por Racing, pero confío en que el “Licha” con su personalidad, pueda asumir ese rol porque ha demostrado que también reúne todas esas condiciones.

Hasta pronto.





domingo, 1 de mayo de 2016

El triunfo del esfuerzo.


Era un encuentro como para cumplir, pero también es cierto que Racing debía de buscar ganar algún partido porque ya la racha de empates se estaba haciendo larga.

Además hay que aceptar que así como presentaba un equipo con jugadores que normalmente no son titulares, su rival también lo hacía, y eso podría haberles quitado cierta entrega a los jugadores, pero al estar liderados por un jugador de la jerarquía de Diego Milito, era suficiente motivo para dejar todo en la cancha.

El encuentro en la primera parte se dio bastante abierto, todo era muy vertical y  en ese aspecto Racing aparecía mostrando flaquezas fundamentalmente por los laterales donde Díaz y Voboril no podían con Espinoza y Chacana.

Al recuperarla Racing buscaba salir rápido a través de su medio campo con Vizmara, Camacho, De Paul y Pereyra tratando de asisitir a Milito y Roger, pero en esa primera parte s epudo apreciar que hay jugadores a los que les cuesta recuperar el juego que alguna vez supieron mostrar, como Camacho a quien nadie le puede negar su voluntad aunque la mayoría de sus arranques, que ilusionan, finalizan de mal modo, lo mismo que pasa con De Paul, a quien siempre se lo ve como despreocupado y quejoso, mientras que a Vizmara que tuvo una actuación bastante buena, a pesar de enfrentar a su ex equipo, lo noto como incómodo en la posición, no así Pereyra que sigue mostrando facetas muy interesantes, como en el gol, cuando pasa rápidamente al vacío a buscar una devolución y de un gran toque deja solo a Roger Martínez ante Díaz, a quien derrota con un gran disparo a la derecha del arquero.

Lindo gol, que quizás le podía haber dado a Racing cierta tranquilidad para manejar el trámite pero no fue así ya que todo era apurado de parte de los dos equipos, salvo cuando la pelota pasaba por lo pies de Milito que exhibió un muy buen juego, haciendo la pausa justa, sacándose un hombre de encima, defendiendo el balón o bien dando el pase certero.

El “Principe” muestra más frescura de lo que esperábamos y pienso que quizás el otro día de local podría haber entrado, porque tiene la claridad que le falta a muchos de sus compañeros y esa cualidad no se logra fácilmente.

La segunda parte nos depararía una sorpresa que no esperábamos, cuando a los dos minutos es expulsado en forma justa Roger Martínez, porque quedarse con un hombre menos determinó, que mentalmente se pensara más en defender el arco propio que buscar el del rival y fue allí donde Racing, con Milito a la cabeza, multiplicó sus fuerzas lo que generó el crecimiento de todos, especialmente de Pereyra quien jugó un gran segundo tiempo porque prácticamente en soledad, se las ingenió para complicar al fondo de Huracán con tres oportunidades como para ampliar el marcador, dejando una clara señal de que debería ser tenido más en cuenta porque es un jugador muy agresivo cuando pisa el área.

También Cabral fue ratificando que su retorno al mejor nivel parece no ser efímero, mostrando más confianza y tomando mejores decisiones, lo mismo que la labor de Ibañez quien sigue demostrando que tranquilamente puede ser arquero titular.

Después los cambios, donde los chicos se encontraron con un partido donde la exigencia no era jugar bien, sino correr, marcar y despejar tratando de no cometer errores graves y evidentemente alguno hubo, pero bueno ya entrar con uno menos es difícil hasta para un experimentado.

Fue el triunfo del esfuerzo, porque todos supieron responder a la circunstancia de estar con 10 hombres (y después con 9) sacando a relucir la fuerza máxima de cada uno y regando el campo de sudor, para defender el gol que le daría a la Academia un triunfo que alimenta el espíritu de los que jugaron y de los que deberán tener la responsabilidad de hacerlo en Bello Horizonte.

Hasta pronto.