lunes, 13 de junio de 2022

Hay bastante que corregir, pero hay mucho más para rescatar

Es evidente que los golpes recibidos en los partidos definitorios, han dejado en el plantel heridas en lo anímico, de las cuales no se han podido recuperar.

Es cierto que el cansancio del partido en Jujuy pudo influir, pero creo que el desgaste principal pasó por la cabeza, por lo emocional, lo que lo llevó al equipo a estar más nervioso y a perder confianza.

Godoy Cruz a través de una presión alta y un juego intenso, hizo que Racing estuviera impreciso y dubitativo, a cometer más errores que aciertos y como consecuencia, a no poder tener la pelota ni hilvanar alguna acción conjunta con la que pudiera generar una situación de gol, salvo una jugada por derecha después de los 15 minutos, donde con una buena triangulación lo puso a Rojas en posicion de gol, pero no la supo aprovechar, todo se fue reduciendo a lanzamientos largos buscando al, ahora sí, solitario Copetti, en su lucha habitual con los centrales o a Chancalay por la izquierda, quien seguía sin finalizar bien lo que insinuaba, pero se imponía a su marcador y hasta lo había hecho amonestar.

Pero la realidad es que Racing parecía estar incómodo, sufrir el partido y a eso le tuvo que sumar la inentendible falta de Chancalay, quien como devolución a una infracción, cruza con una patada a un jugador rival y por advertencia del VAR es expulsado (pensar que venía de salvarse que lo expulsen frente a Huracán).

Iban 33 minutos de ese primer tiempo y este Racing diezmado en el banco, perdía en el campo un jugador ofensivo y entonces el panorama se volvía más complejo, porque salvo alguna aparición de Miranda y las ganas de Copetti, ningún otro ofrecía solución alguna.

El segundo tiempo no cambió y ya de entrada Racing comenzó a tener problemas con esas ya reiteradas y famosas pelotas que sus rivales ponen a espaldas de la última línea, poniendo a sus delanteros mano a mano con el arquero, como la que recibe Ojeda a los 2 minutos pero que con una veloz salida, “Chila” Gómez logra tapar su remate.

El equipo no reaccionaba y a los 7 minutos, un centro desde la izquierda hipnotiza a los defensores académicos, menos a Salomón Rodríguez que entrando por medio del área se anticipa a todos y convierte.

Demasiadas concesiones que Gago intentó solucionar con la entrada de Fabricio Domínguez por Jonathan Gómez, pero el equipo no tenía reacción, daba la sensación de que se iba ahogando en su propia ineficacia y era como una derrota anunciada, con distracciones en defensa que volvían a darle a Godoy Cruz una nueva chance y otra vez con un nuevo pelotazo largo de Ferrari, para que Salomón Rodríguez vuelva a quedar solo frente a Gómez, pero por suerte “Chila” volvió a responder bien.

El destino le da un incentivo a Racing, cuando Negri por segunda amarilla (infracción a Domínguez) es expulsado, por lo que estando en igualdad jugadores, Gago ubica a Cardona por Mura, para ver si podía encontrar con él y con Miranda un circuito de juego, que pudiera asistir a Copetti.

Pero a los 24 minutos un nuevo lanzamiento largo habilita a Allende por izquierda, mientras los defensores de Racing que quedaron en el camino, veían como su centro rasante y cruzado volvía a ubicar a Salomón, esta vez en el segundo palo, para que convierta el segundo y definitivo gol.

Gago decide enviar a la cancha a Prado por Piovi y a Román Fernández de 16 años por Rojas, cambio este último que con todo respeto no comparto, no por Rojas, sino por hacer debutar a un chico de 16 años en un partido donde el equipo no mostraba ningún aspecto positivo que pudiera respaldarlo.

El gol de Insúa, finalmente anulado y una incursión de Miranda que no pudo darle mejor destino a su remate, fue lo más importante de Racing de allí hasta el triste y preocupante final de un equipo que desgastado física y mentalmente, tuvo que digerir además la salida del plantel de  Nery Domínguez, uno de sus mayores referentes dentro y fuera de la cancha como así también las partidas de Javier Correa y Benjamín Garré.

Así y todo, creo que hay bastante que corregir, pero hay mucho más para rescatar porque aunque Gago haya cometido errores, no dejo de reconocerle que con estos mismos jugadores construyó un equipo que por su idea de juego, fue respetado por todos los clubes y por muchos de los hinchas académicos, por lo que sería una pena que todo esto se derrumbe rápidamente como si fuera un castillo de arena, por lo tanto se necesita que la CD, respalde ya a este proceso, con la incorporación de los refuerzos necesarios que le aporten a este plantel jerarquía y calidad, con el fin de que podamos tener un Racing, no solo más competitivo, sino con la mentalidad ganadora que todo equipo grande debe tener.

El apoyo de los hinchas para el equipo que siempre está.

Hasta pronto.