domingo, 11 de diciembre de 2016

El partido de las despedidas


Desde que comenzó el encuentro Racing parecía que jugaba de compromiso, ante un rival que estaba preocupado y asustado porque está muy comprometido con el descenso.

Lo único que atinaba hacer Olimpo era buscar por la izquierda a Pizzini que increíblemente siempre estaba libre, es decir con esa única jugada intentaban que ese jugador llegara al fondo y tirara un centro,  para llevar peligro al arco de Orión.

De hecho muy poco para preocuparnos, pero Racing no lo pudo solucionar casi nunca, porque tenemos un marcador de punta que siempre vive en el suelo, siempre se queja, tenemos dos centrales que no dan ninguna seguridad, de los cuales uno, dicen los periodistas partidarios que saben de esto se está por ir y un marcador de punta izquierda al que no se le puede achacar mucho pero que es evidente que no está bien físicamente.

En el medio nos encontramos con Guisao que da la sensación que no sabe a que vino, ni que es jugar en Racing mientras se relega a chicos como Brian Mansilla y otros, a González que no encuentra su lugar y a un Aued, que no sale del equipo ni en un cambio, aunque juegue el peor partido de su vida sumados a Romero, que lo critico porque desaparece por momentos y porque no se pone el equipo al hombro, pero que dentro de todo es el único que puede poner un pase como la gente.

Y arriba un gran jugador como Lisandro López, un líder solitario, desperdiciado y que solo no puede contra el mundo, junto a un Bou que, desde que se frustró su pase a China sigue enojado con los dirigentes y su cabeza todavía sigue viajando por el mundo, pero nunca se detiene en Avellaneda.

Creo, sinceramente, que las versiones que corrieron esta semana en todos los programas partidarios, a los que trato de escuchar siempre, son verdades que quedaron reflejadas en el partido de hoy, porque la apatía con que el equipo encaró el mismo no puede ser otra cosa que la fiel demostración de que algo interno está sucediendo.

Hubo equipos espectaculares en donde había grupos enfrentados, pero que en la cancha dejaban todo y lograban títulos, pero aquí parece que en realidad el clásico con el rojo lo hubiéramos perdido, porque yo esperaba que ese gran triunfo nos hubiera dado un gran envión anímico para decir aquí estamos y así llevarnos por delante a los rivales que nos tocara enfrentar.

Pero no, fue totalmente al revés, por eso creo que esa entrega total en el clásico fue como un “acuerdo” porque si no la hinchada se los comía crudos y por ese partido dejaron las diferencias de lado, las que volvieron a salir a flote a partir del enfrentamiento con Boca.

Si es verdad lo de Bou y su problema con la AFIP, hoy no debió patear el penal, pero suceden cosas que uno no espera.  

Lo de la “Pantera” de hoy fue de lo peor de este jugador desde que está en Racing, desganado como la mayoría, sin confianza y como jugando porque sí, porque tengo que estar, porque me pusieron y se le veía en la cara, que lamentablemente para él, la TV muestra.

Después Rosales, un joven que vino de Aldosivi, club donde gambeteaba a todos, pero en Racing no se pasa a un jugador, solo tira centros que pegan en su marcador, y pensar que Tete Quiroz dijo que era como Centurión…, aunque también dijo que tendría que haberse quedado un tiempo más en el equipo marplatense.

Estamos muy mal, pero creo después de estos últimos encuentros que nos va a costar mucho estar prendidos, porque hoy nuevamente quedó demostrado que este equipo no tiene juego, porque en el primer tiempo abusamos del pelotazo largo para que la cabecera alguno arriba o encontrar la segunda pelota y en la segunda etapa fue porque Olimpo nos regaló el campo de juego, esperando la contra que finalmente llegó y sentenció el partido.

Por último pienso que éste fue el partido de las despedidas, porque creo que esta actuación volvió a mostrar quienes se quieren quedar y quienes no, como dijo el capitán “Licha López” "El jugador que no quiere quedarse en Racing que se vaya”, aunque  lamentablemente no se pueden traer muchos jugadores.

Respecto del técnico hay cosas que no entiendo, Ortiz perdió la titularidad por un partido mal jugado, Vizmara nunca más tuvo una oportunidad, a Candia no lo conocemos, Videla juega como hoy solo 10/15 minutos, un cambio inentendible.

Y el partido contra Unión será una anécdota más en este irregular camino por el que transita Racing y lo que más me preocupa es el futuro, porque con esta base no se puede aspirar a mucho, por lo que espero que en este último enfrentamiento les de la oportunidad a algunos chicos.

Para finalizar con todo respeto, opino diferente al técnico respecto a los refuerzos, ya que según dicen los que hablaron con el “Ruso” que éste pretende  un zaguero central de jerarquía y un volante por derecha, yo digo que se necesitan dos zagueros centrales de gran categoría, porque de otra manera la defensa va a hacer agua siempre, mientras que del medio para arriba podríamos arreglarnos con los que quedan y con los chicos.


Hasta pronto.