martes, 27 de mayo de 2014

De un extremo al otro


Pareciera que en Racing es difícil coincidir con los momentos exactos para realizar cambios definitivos y lograr de una vez por todas comenzar la titánica tarea de convertirse en un club grande de verdad, como hoy virtualmente sigue figurando, pero solo gracias a su hinchada.
Cuando hay cambios de técnicos nunca está libre el que aparentemente se desea y cuando lo está se da una situación como la actual, donde una dirigencia en transición seguramente no continuará a partir de diciembre del corriente año.
No hace mucho tiempo Falcioni o Alfaro parecían ser los técnicos más deseados para dirigir a Racing, por lo menos del gusto de Molina, pero nunca coincidían los momentos  para ofrecerles el cargo.
Esta vez, que si hay tiempo, vaya a saber porque razones, el gusto ha variado ya que Blanco y Cía. han decidido pasar de un extremo al otro, quizás por la muy mala imagen que dejó el equipo dirigido por Merlo, decidiéndose en este caso por un DT de perfil joven y ofensivo.
Es muy fácil cambiar de gusto, algo común desde hace muchos años en nuestro querido Racing, como si con eso bastara para triunfar, cuando en realidad, por lo menos desde mi objetividad, muy poco se puede lograr si no acompañan a cualquiera de los sistemas de juego, jugadores con personalidad y capacidad para entender el mismo.
Hoy para la mayoría de los hinchas de fútbol Simeone es uno de los mejores técnicos del mundo, como por supuesto lo es Guardiola, Mourinho, Martino, etc. cada uno en su estilo sabe que hacer, pero no es casualidad que siempre sus equipos los integren buenos y muy buenos jugadores.
Para poner un ejemplo, es muy difícil que cualquiera de ellos o para volver a la realidad, Gareca,  Bianchi o Ramón Díaz se hagan cargo del equipo de Racing actual y lo dirijan sin incorporar jugadores de prestigio, porque ellos saben que sería practicamente imposible realizar una buena campaña con ese plantel y con  la presión de una hinchada como la de Racing. Solamente hay que recordar lo que le pasó a R. Díaz y a Gallego en Independiente.
Por eso estos técnicos son casi imposibles de contratar, porque detrás de ellos que tienen altas remuneraciones, deben llegar algunos jugadores también cotizados y de muy alto contrato.
De allí mi asombro cuando la dirigencia actual fue por Gareca, que por supuesto es de mi agrado, generando una falsa expectativa y que además finalizó con declaraciones contradictorias entre el presidente y sus colaboradores sobre el motivo por el cual no llegó a concretarse, para finalmente pasar del “bolsillo de payaso” al “bolsillo del cocodrilo” y entonces elegir el de menor costo, con el “paragüas” de que es lo que estábamos buscando.
Eso es lo que duele, lo que lastima, lo que enoja. Lo que los hinchas de alguna manera sentimos como una agresión a nuestra modesta inteligencia, porque ¿Qué hubiera pasado si Gareca hubiera dicho que sí? ¿Adonde hubiera arrastrado a Blanco y su gente con la contratación de jugadores de alto nivel?
Pero pase lo que pase, da toda la sensación que la contratación de Cocca o quien fuere, estará atada con un hilo ya que mucho dependerá de lo que se incorpore y de cómo funcione el equipo, caso contrario a fin de año y con nuevas autoridades, será recordado como un técnico más en la larga lista académica.
Ojalá no sea así y que todas sus intenciones se puedan cumplir, entendiendo que lo lógico –por lo menos desde afuera- hubiera sido que se hubiera tratado de buscar por todos los medios un consenso entre los actuales responsables y los que posiblemente lo sean a partir de las elecciones de fin de año, para poder darle al nuevo cuerpo técnico un respaldo firme y no tan frágil como el que seguramente le puede brindar la actual CD.
Hasta pronto.





domingo, 18 de mayo de 2014

Triste y solitario final.


Como la muerte termina muchas veces con el sufrimiento de personas afectadas por largas enfermedades terminales y al mismo tiempo le dan también un cierre al dolor y la angustia que vienen padeciendo todo ese tiempo los que lo quieren y lo rodean, diría que el cierre del campeonato para este equipo de Racing , enfermo terminal de derrotas en la temporada que acaba de finalizar, fue, por lo menos para mí, también la culminación de un largo calvario.

Desde todo punto de vista y robándole prácticamente el título a la novela de Osvaldo Soriano, digo triste y solitario final para un plantel frágil e inexpresivo, que hizo todo lo posible para lograr la hazaña de perder 21 de los 38 partidos.

Triste, porque habría que hurgar bien hondo para encontrar algo rescatable durante los dos torneos en un plantel que, parece ser, lo único que hizo fue jurarle amor eterno a Zubeldía, porque sino no se entiende como les ha afectado anímicamente y mentalmente la salida del “amigo” Luis, con la desgraciada consecuencia de no aceptar a ninguno de los otros técnicos que le sucedieron, en lugar de dejar todo por el club que les paga, por la gloriosa camiseta que visten y por los hinchas que siempre los han respaldado.

Solitario, porque de alguna manera sin técnico, han quedado solos ante el mundo y hoy en Mendoza, aunque no se admiten visitantes, la tribuna vacía sin hinchas de Racing fue la mejor imagen para la despedida, aunque lamento que hayan sido en su mayoría chicos quienes hoy tuvieron que dar la cara en el partido final de un ciclo que se hizo interminable y no los verdaderos responsables de esta campaña, que podría haber finalizado de manera catastrófica si hubiera durado algunas fechas más.

Nada se puede lograr con jugadores que han perdido la autoestima, por lo que espero que el técnico que sea elegido para dirigir a Racing, tenga la suficiente autoridad, ascendencia y pedagogía para poder devolverle o inculcarle a los que queden en el nuevo plantel, ese amor propio y esa estima que todo ser humano necesita para afrontar las responsabilidades que el destino les pone en su camino.


Hasta pronto





domingo, 11 de mayo de 2014

Una hinchada que no olvida ni perdona.


La semana comenzó nerviosa para este Racing lleno de presiones, tanto por parte de los jugadores como de Merlo, sumándole que todavía estábamos matemáticamente con peligro de descender, aunque tenían que darse varios resultados para que esto sucediera.

Pero el martes comenzó a descomprimirse la situación con la renuncia de “Mostaza” – quien aparentemente ante la decisión tomada por la CD de que no iba a continuar siendo el técnico, decidió retirarse antes.

Aparentemente dirigentes y jugadores se sacaron un peso de encima, pero esto dejó muy expuesto a un plantel que no tiene defensa alguna, ya que el mal desempeño del equipo no nace justamente con la llegada de Merlo, sino que comienza cuando se le renueva a Zubeldía y que a partir de su salida, vaya a saber porque, ningún técnico les comenzó a caer bien a la mayoría de los integrantes del plantel, incluido nuestro respetado y querido “Mostaza”, quien mal o bien fue el que rescató a Racing de un tobogán que parecía no tenía piso alguno.

La verdad era que este sábado podía pasar cualquier cosa en el Cilindro, ya que toda la descarga emocional de los hinchas caería sobre ellos y si además seguía en juego la posibilidad de pelear el descenso, la presión que debían sostener los que jugaban iba a resultar intolerable, con el agravante de que ante un resultado adverso podía desencadenarse un problema más grave.

Pero el viernes el triunfo de Olimpo ayudó a aliviar la situación ya que evidentemente al perder Godoy Cruz, Racing salió de la lucha por el descenso y seguramente eso provocó una disminución de la tensión, tanto en el plantel como también en los hinchas, aunque a los jugadores no los eximía de culpa, sabiendo que el sábado serían receptores de una sanción popular de parte de la hinchada.

Radaelli, quien se hizo cargo interinamente, trató de darle otra fisonomía al equipo y tuvo que improvisar algunas variantes incorporando más chicos, porque se encontró con lesionados, suspendidos y con la venta de De Paul, quien sensatamente, al estar Racing fuera de la pelea por el descenso, la CD no lo hizo jugar por haberse oficializado el pase al Valencia de España,

Racing jugó mejor que otros partidos e hizo los méritos para ganar, sobre todo en el segundo tiempo que se adueño del encuentro, algo que no sucedía hace mucho, pero le faltó decisión y claridad para lograr el triunfo.

Desde la línea de fondo, donde se destacaron los dos centrales ( no se entiende como Migliónico nunca pudo jugar 4 o 5 partidos seguidos en lugar de Cahais ), se intentó salir desde abajo jugando la pelota al piso y sin mucho revoleo salvo en momentos apremiantes, y por instantes se pudo ver una buena circulación del balón que nacía en los volantes centrales con un Aued que realizó una buena tarea (aunque lento tiene intenciones de tratar bien la pelota) .

Quizás si hubiera estado De Paul, en lugar del “chico” Hauche hubiera habido un juego más punzante junto al “atrevido” Roger Martinez , aunque Racing sigue necesitando de Vietto,el jugador que sigue estando en deuda, más aún jugando como volante, donde no tuvo peso, perdiendo varias pelotas en zonas que comprometían a sus compañeros de defensa.

En síntesis, el equipo ya sin mucha presión mejoró en su juego, pero era lógico que en el  último partido en casa recibieran al finalizar el partido un coro de silbidos como fría despedida, el veredicto de una hinchada que no olvida ni perdona la desastrosa campaña de la que fueron responsables.

Porque a los hinchas nos cuesta digerir lo que hemos vivido durante esta temporada donde todo fue muy confuso y donde dirigentes y jugadores han dejado como resultado final, un manto de sospecha que todavía oculta vaya a saber cuantas cosas.

Hasta pronto





miércoles, 7 de mayo de 2014

“Estilo Racing”


Desde hace mucho tiempo que Racing vive corriendo detrás de un éxito y todo lo que inicia, salvo en el 2001, inexorablemente finaliza en un fracaso.

Se podrán esgrimir miles de razones, pero yo creo que es porque se vienen aplicando soluciones espasmódicas buscando logros personales, en lugar de gestionar pensando en el éxito de la institución, sin darse cuenta que ese éxito finalmente también sería el de ellos.

Son demasiado los errores que quedan al descubierto a través de las distintas Comisiones Directivas y nunca se sabe bien cual es la verdad, pero lo cierto es que Racing convive con esa condición de desesperación que los lleva a tomar decisiones a destiempo, sin que podamos conocer claramente cual es la causa que las provoca.

Hoy es el tema del técnico y la diversidad de estilos de juego que pasaron  en los últimos años, nos da una pauta de la desorientación dirigencial sobre que es lo que Racing busca, cuando elige un conductor.

Si tomamos como ejemplo desde el 2002, desde la salida de Merlo en adelante: Ardiles, Comisso, Cappa, Colombatti, Fillol, Rivarola, Quiroz, Fanesi, Simeone, Merlo otra vez, Costas, Micó, Llop, Caruso Lombardi, Barbas, Vivas, Russo, Simeone, Basile, Zubeldía, Radaelli, Ischia, Nacho Gonzalez y Merlo.

Como se puede observar, más de 20 técnicos en 13 años.

En fin…“estilo Racing”

Hay mucho que cambiar desde la cabeza a los pies, por eso pienso que aquellos que hoy  tienen la responsabilidad de contratar al futuro técnico y a los refuerzos para el próximo torneo, sabiendo además que en diciembre no estarán al frente de la CD, reflexionen sobre este tema y consideren la posibilidad de realizar una interconsulta con los referentes de todas las agrupaciones, para buscar consenso sobre el tema contrataciones y de esa manera evitarle a quien presida Racing desde diciembre, convivir con un técnico y con jugadores que no eligió.

Hasta pronto




lunes, 5 de mayo de 2014

Cuando se juega a no perder, es difícil ganar.


Como se puede explicar lo que no tiene explicación.
Sí, porque este Racing que juega tan mal y pasó después del tercer gol a prepararse para comerse una goleada, generó un par de situaciones de las cuales logra el descuento y un penal sobre la hora como para empatar un partido que prácticamente nunca buscó.

Fue en ese momento donde el Monumental se llamó a silencio y donde en el corazón de los hinchas de Racing rondaba nuevamente la esperanza de vivir otro milagro.
Pero esta vez no lo hubo porque al no convertir el penal, en un minuto Saja pasó de héroe a villano, redondeando una noche para el olvido en su actuación y sobre el cual seguramente todos los hinchas dictamos sentencia a pesar de que muchas veces nos ha salvado de caer derrotados.

Como siempre, sabemos que jugar contra River es un partido perdible hasta por historia, pero el destino nos había dado la posibilidad de lograr el punto que nos despertara de la pesadilla, esa que nos tiene inquietos y no nos deja descansar tranquilos, aunque por cierto, es muy difícil que podamos aspirar a más con estos jugadores y con un técnico cuya táctica es salir a esperar a ver que hace el rival y reaccionar recién cuando está en desventaja.

Lo digo con dolor por “Mostaza” pero, cuando se juega a no perder, es difícil ganar.
Reconociendo que la  culpa no es solo de Merlo, porque estos jugadores que no juegan bien casi nunca, tampoco tuvieron éxito con otros técnicos,  a fuerza de ser sincero siento que desde el banco también se toman algunas decisiones que retroalimentan lo malo.

Una de las cosas que me preguntaba al ver el primer tiempo era porque no ubicó a un  volante sobre la izquierda (por ejemplo a Aued) apara ayudar a Corvalán, quien a pesar de no tener extraordinarias cualidades carecía de la ayuda necesaria para frenar esa escalada ( Saveljich, por lo menos tenía a Villar delante de él ) y jugar con De Paul más libre y adelantado junto a Hauche, Vietto o Viola,

Y  pasó lo que tuvo que pasar. River aprovechó bien esa franja y por allí llegaron todas las jugadas de los goles de River (incluso no estando Corvalán ) como la del tercer gol, donde la defensa de Racing parecía que tenía platea preferencial.

Para finalizar quería referirme a manifestaciones cruzadas y que causan un daño irreparable, porque quiere decir que alguien falta a la verdad y este juego siniestro le está causando un mal muy grande a la institución que por supuesto está por encima de todo.

Ahora le toco el turno al presidente Blanco, al declarar que a Merlo le dijeron que había que sacar puntos en el torneo anterior pero en este se debía pelear el campeonato, algo totalmente enfrentado con lo expresado por “Mostaza” la semana anterior.

Hasta pronto