domingo, 30 de septiembre de 2012

Rápido y furioso.


Tercer clásico ganado, lo que nos brinda una gran satisfacción.


Racing ganó bien eligiendo un camino que no es el que quizás guste más.

Mejor dicho, que posiblemente a la vista no sea del agrado de la mayoría, pero que por ahora recoge puntos importantes.

Y vaya sin son importantes.

Estos puntos son los que en el futuro le pueden dar a la conducción técnica la tranquilidad necesaria para buscar un mejor juego.

Racing sorprendió a San Lorenzo con mucho vértigo y con gran solidaridad de todos sus jugadores, comenzando por sus hombres de punta que ahogaban a los defensores del Ciclón, obligándolos a cometer errores, como la mano del penal, que Saja convierte en gol.

A partir de allí buscó contragolpear pero siempre con agresividad frontal, mientras seguían todos colaborando en la recuperación de la pelota.

Racing siguió en esa línea y así llegaron los goles que fueron desarmando a un San Lorenzo quebrado anímicamente.

Hubo jugadores que se distinguieron como Saja, de excelente trabajo; Villar, incansable y criterioso; Cámpora, por su movilidad, su entrega en la recuperación y su gol; Centurión por su valentía y atrevimiento y Vietto quien con sus inteligentes movimientos en la segunda parte generó grandes problemas al fondo azulgrana convirtiéndose en el artífice de los goles que se concretaron en esa etapa.

Hoy por hoy no puede salir del equipo porque además de ser punzante y encarador es inteligente, lo que le da un plus sobre los demás delanteros.

También es de destacar la mejoría notable de Pillud y el correcto trabajo de Ortiz, Cahais, Pelletieri y Zucculini. Sobre Corvalán digo que lo vi mejor que en su última actuación, sin cometer errores groseros pero notando que no se siente seguro como para manejar la pelota.

Racing fue un equipo rápido y furioso porque impuso un ritmo vertiginoso con mucha presión y porque salió a vencer y venció con autoridad.

Porque además peleó el partido en todo momento sin guardarse nada.

Porque este equipo que tiene hambre de gloria no se alimenta de sutilezas y grandes talentos para saciarlo, lo está logrando con estrategia, entrega y sacrificio.

Pero también es cierto que apostando siempre al vértigo, puede encontrar obstáculos corriendo el riesgo de “estrellarse” al no tener pausa e ideas como para cambiar de marcha, por eso todo dependerá de cómo se sigue creciendo en juego y sistema.

En puntos lo está haciendo en buena forma.

Llega Colón y es un buen momento para tomarse revancha de la Sudamericana.

¿Quizás esta vez con un planteo similar al que uso contra River?

Un párrafo aparte para Caruso: Está pasando un mal momento y me dolió su imagen, porque no olvido su paso por Racing, que con un equipo modesto lo sacó de un trance difícil logrando los puntos que muchos técnicos no pudieron conseguir.



Hasta pronto.

domingo, 23 de septiembre de 2012

A veces, lo pensado sale bien.


Quiero comenzar este comentario diciéndoles que estoy feliz.


Mejor dicho muy feliz.

Porque Racing ganó donde prácticamente no gana nunca. Donde lo he visto perder casi siempre, aún cuando tuvo grandes equipos –como el del ’66 y River nos quitó el invicto de las 39 fechas- aunque es cierto que el presente de ambos es muy pobre y la propuesta para el espectáculo, fue para el olvido.

A priori pensé que River lo iba a atacar con todo a Racing y temí por la poca solidez que venía mostrando el equipo. Por suerte no fue tan así ya que River también mostró una falta de juego llamativa y mucha inseguridad en el manejo de la pelota, aún cuando la posesión de la misma había sido entregada por Racing desde el comienzo del encuentro.

Pero a este desdibujado andar de los millonarios hay que agregarle lo positivo de este planteo de la Academia –si se quiere mezquino a la vista- pero donde mostró una gran actitud para darle firmeza y consistencia al esquema planificado, con puntos altos en varios jugadores, sobre todo - por supuesto -del medio para atrás.

Racing disputó cada pelota como si fuera la última y así evitó que River pudiera tener un andar más fluído – salvo en un tramo del segundo tiempo donde entraron Lanzini y Mora- lo que deslució más el encuentro, pero le dio confianza a los jugadores de la Academia quienes ganaron en aplomo y presencia.

La defensa respondió desde la seguridad de Saja y el muy buen partido de los centrales Ortiz y Migliónico – creo que debe mantenerse la dupla- con un buen trabajo de Cahais sumado a un gran gol. Pillud alterno buenas y malas.

En la mitad de cancha Zucculini sobresalió y se convirtió en una de las mejores figuras, cubriendo, recuperando y entregando bien. Pelletieri con su habitual entrega se hizo fuerte junto a Zuccu. Es evidente que fue un acierto reemplazar ubicar a Zucculini por Camoranessi, aún sacrificando a Villar que dejó todo trabajando más cerca de Cahais que en su función habitual. Centurión que apareció más por derecha no tuvo una buena actuación.

Adelante Vietto intentó pero perdió mucho en la disputa de la pelota y no encontró oportunidades, mientras Sand que se retrasó mucho, lamentablemente paga los platos rotos porque la imagen que deja es muy pobre, aún entendiendo que es muy difícil que tenga una oportunidad de gol si no recibe asistencias ya que no se ataca y/ o desborda por los costados para tirar por lo menos un centro.

Después en el segundo tiempo River insinuó más mientras Racing se refugiaba en su área, pero también es cierto que en esa desesperación, el equipo de Nuñez iba dejando claros y en una ráfaga a partir de los 20 minutos la Academia tuvo 3 oportunidades y en la última de ellas se logró el gol del triunfo. Bastante bien Camoranessi -reemplazó a Sand- buscando cortarle el ritmo a River y tratar de dar un asistencia que lastime –como la pelota que le puso a Vietto y salvó Barovero- , Corvalán sumándose a los despejes a cualquier lado y Aued buscando defender en el poco tiempo que le tocó jugar.

Por supuesto que todos fueron cambios armados para sostener un resultado.

Primero para el empate y después para defender el triunfo.

Y, a veces, lo pensado sale bien, porque a pesar de que el partido fue muy malo con un Racing que ofreció muy poco, a estos partidos hay que ganarlos y festejar ya que son las victorias “imposibles”, de esas que alimentan el espíritu.

Por eso hoy todos los hinchas de Racing tenemos que celebrar, disfrutando de este logro ante un rival que nos “cacheteaba” siempre.

Hasta pronto.

domingo, 16 de septiembre de 2012

Fecha de vencimiento.


Después de ver este nuevo encuentro por el Torneo Inicial frente a Estudiantes sigo insistiendo de que Racing no sabe que hacer ante un planteo defensivo del rival.

Nos pasó en Córdoba con las ventajas que tuvimos y nos pasó esta noche.

Hoy ya no es un misterio como jugarle a Racing –sobre todo de local- .

Es darle la pelota y esperar que se equivoque debido a su falta de ideas en espacios reducidos porque este Racing no sabe a que juega.

Racing hoy depende exclusivamente de lo que haga Centurión y éste carga con esa mochila, con las posibilidades de emigrar a Europa en un corto tiempo y ahora la llamada a la Selección.
Demasiado para que por momentos no se confunda.
De cualquier manera siempre es el más buscado para ver como intenta una jugada magistral que genere una jposibilidad de gol.

Los demás, salvo Saja, aunque tuvo su cuota parte de culpa también, en un nivel muy bajo.

Respecto a Sand es cierto que no está jugando como se lo esperaba y que aparece como un muchacho sin fe invadido por un desánimo total, pero también es justo decirlo que de la forma que ataca Racing es muy difícil que consiga hacer un gol.

En este equipo no hay idea alguna de cómo hacerle el juego al “9”.

Hauche tuvo dos posibilidades importantes en el primer tiempo como para habilitar a Sand y eligió patear a cualquier parte, en la única oportunidad que lo hizo fue en un centro de zurda que Sand trató de cabecear sin éxito.

Después hubo errores que llaman la atención, como por ejemplo ante un rechazo de un corner a favor recibe un jugador de Estudiantes en la medialuna del área grande e incia un contragolpe ante la mirada de los jugadores de Racing que estaban a los costados del área. ¡Racing no marca en ataque a los posibles receptores de los rechazos.!

En el primer tiempo, detrás de los volantes de la Academia los jugadores de Estudiantes recibían cómodos y sobre el costado de Pillud siempre había uno que le ganaba la espalda en una jugada simple y Ortiz nunca salía a cubrirlo.

Si digo que la línea de fondo está muy mal no sería justo, porque todo está mal.

Pelletieri se debatió solo contra un medio campo poblado, con un Braña que con su picardía, personalidad y capacidad manejó el partido – por momentos Estudiantes me hizo recordar a aquel de Zubeldía, lástima que enfrente no estaba el Racing del ’66-.

Los laterales deberían entender que los centros a veces hay que tirarlos sin llegar al fondo y no como quisieron hacerlo Pillud y Corvalan que la perdían cuando querían gambetear para alcanzar la línea final provocando un contraataque.

También hubo jugadas que valen como ejemplo: Primer tiempo, pelota en poder de Camoranessi en el medio campo, giro y pase atrá a Cahais, giro y pase atrás a Saja para que tire un pelotazo arriba y que se arreglen.

Después, los cambios, a mi gusto realizados tarde aunque supongo que no es fácil, sobre todo porque el técnico debe tener sensaciones encontradas donde se mezcla lo afectivo con lo profesional, fundamentalmente con Sand.

Debe ser duro para él, pero debe entender que algo hay que hacer para que esto cambie porque sino, lo cambian a él.

Me pregunto ¿Los jugadores entienden lo que quiere el técnico?

Porque yo veo a Racing como un equipo sin alma. Un equipo sin fuerza física y anímica y confundido en su andar.

Un equipo que si sigue de esta manera tiene fecha de vencimiento en el corto plazo.

Ojalá vea mal, pero la televisión, que tiene grandes defectos como para ver un partido, tiene algunas virtudes como la de mostrar las caras de cerca y hay expresiones que son elocuentes.

Hasta pronto.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Ni una idea.


Un equipo que sigue navegando en la nebulosa. Un equipo que se muestra indeciso cuando tiene la posesión de la pelota. Con jugadores que parecen ¿cansados? ¿fatigados mentalmente? ¿confundidos?...

Bueno en realidad, no solo los jugadores.

Me parece que también en el banco no hubo ideas claras para aprovechar estas “gauchadas” que nos había deparado el destino (2 jugadores expulsados antes de los 20 minutos del segundo tiempo y 5 minutos de descuento).

Pero para este Racing parece que las ventajas son un obstáculo, un perjuicio, porque carece de ideas y de la inteligencia necesaria para generar ocasiones de gol y así poder ganar el partido teniendo 2 jugadores de más que el rival.

Sólo dos situaciones de gol en los últimos 30 minutos (incluido el descuento).

En realidad una perfomance que deja mucha incertidumbre para el futuro.

Del equipo en general no se rescata nada.

El chico Galanternik tuvo en el gol y en el segundo disparo al arco en la segunda parte el mismo error, al rechazar la pelota y dejarla al borde del área chica, pero sería injusto recriminarlo por eso en su primer partido en primera. Después sin tanto trabajo se mostró atento.
Peor fue lo del resto del equipo, con un Pillud que no levantó un centro como la gente, con Corvalán que no termina de concretar nada, con un Villar desconocido que jugó para mi gusto su peor partido, con Camoranessi de muy bajo desempeño, con una lentitud por demás alarmante y con un Sand realmente inexistente.

Los demás apenas para cumplir apostando todos a Centurión como si fuera el único que podía generar algún peligro y así lo fue, aún con altibajos y muchas veces enredado.

En Córdoba a los jugadores y al técnico no se la cayó ni una idea y Racing terminó perdiendo el partido y dejando una imagen lamentable.

Una lástima por la gran oportunidad desperdiciada para llegar a la punta, pero también una ocasión para que el técnico pueda reflexionar y darse cuenta de que -por más que duela- se debe reemplazar a quienes no tiene buen rendimiento.


Hasta pronto.

martes, 4 de septiembre de 2012

Racing marcha Vietto en popa con la fe de “San” Agustín


Cada partido de Racing está lleno de momentos de angustias y alegrías, con resultado incierto hasta el final.


Y este fue uno de ellos. Con detalles estelares y pocas veces observados.

Zubeldía apostó para reemplazar a Hauche, a un jugador que en el 2011 hizo debutar Simeone y que venía siendo apuntalado por el técnico actual: Luciano Vietto.

Un jugador que había sido expulsado ante Colón por la Sudamericana en el partido revancha el jueves pasado.

Un chico con características totalmente distintas a las de Hauche, pero que desde su sencillez, humildad, buen manejo de pelota y gran capacidad para definir con ambas piernas, hoy nos sorprendió gratamente y nos hizo vivir una noche de alegría.

Haciendo un repaso general de lo sucedido, Racing salió a ahogar a San Martín de San Juan, y generó a través de Centurión lo mejor de Racing en esa primera parte, incluyendo un penal no cobrado por el árbitro Álvarez y de Vietto, quien tuvo un par de situaciones y en la segunda logró convertir su primer gol  –¡diríamos golazo!- para abrir el marcador.
San Martín tuvo lo suyo y así finalizaron los primeros 45 minutos.
El equipo había mejorado en general, pero en el segundo tiempo, Racing comenzó como contra Colón, esperando y entregando la pelota quizás por propia decisión o por un desgaste natural por lo que se exigió en la primera parte. Eso le permitió a los sanjuaninos apoderarse del balón y dominar el juego, logrando empatar el partido con un buen gol.

A partir de allí Racing reaccionó y volvió a convertir de cabeza a través de Vietto nuevamente, y eso minó las fuerzas de San Martín. Diez minutos nuevamente Vietto al recibir de Villar, después de una buena jugada de Pelletieri por derecha convierte el famoso hat-trick.

Locura, delirio y felicidad de todos los hinchas de Racing por la aparición este chico.

A todo esto hay que sumarle un hecho inesperado, pero con final feliz para Racing, cuando sobre el termino del encuentro es expulsado De Olivera cuanto comete una falta dentro del área. Penal para San Martín y la fe de Pelletieri para calzarse la camiseta de arquero ya que Racing había agotado los cambios.

La angustia invadió a todos los hinchas de Racing ya que faltaban 2 minutos y el descuento. Caprari dispara a la derecha del “improvisado” arquero y gran atajada en dos tiempos.

Fue la frutilla del postre para un triunfo que nos ubica a un punto de la punta.

Pero nobleza obliga, esta vez también hay que darle la derecha al técnico.

Por supuesto hay cosas para mejorar, ya que por ejemplo Sand no está teniendo buenos partidos y se lo nota como contrariado. Pero Aued ha mejorado su nivel respecto del torneo anterior, se lo ve mas seguro a Pillud y Corvalán superó sus bajos rendimientos e incluso se lo vio más en ofensiva.

Racing marcha Vietto en popa con la fe de “San” Agustín.

Estamos arriba, cerca de la punta y aunque tengamos inconvenientes como el tema de reemplazar a los dos arqueros por un juvenil, éste envión le debe dar al equipo una fuerza anímica que no debe desaprovechar en Córdoba.

Hasta pronto.