jueves, 21 de septiembre de 2017

Racing encontró el enganche.

Fue muy importante dejar atrás al Corinthians de Brasil en la disputa por la Copa Sudamericana, pero fundamentalmente destaco la actitud y el compromiso del equipo para disputar este partido, de gran significado anímico por el valor de su rival.

Es cierto que uno tiene sensaciones encontradas, porque los planteos de Cocca no hacen que veamos un equipo vistoso, de los que tienen tenencia de pelota y buena circulación, pero también es verdad que uno quiere logros, exige resultados, que es lo que finalmente termina valorando y hoy por hoy, Racing no está en condiciones de ofrecer un juego muy aceitado, está para luchar y conseguir objetivos, sobre todo en estos partidos de copas internacionales.

A partir de esa premisa, es para destacar su concentración durante todo el encuentro y el sostenido orden táctico, que llevó al equipo brasileño a que prácticamente no pudiera patear al arco y no tuviera ninguna situación de gol, lo que le permitió a Racing, después de bastante tiempo, mantener el arco de “Chila” Gomez en cero, quien sin ser requerido muchas veces siempre mostró tranquilidad y seguridad, como en el último centro que cortó sobre el final del mismo.

En la línea de cinco se pudo ver a un Vittor impecable, el mejor, aunque Barbieri, también lo hizo en gran forma, mientras Grimi, con su entrega, cubrió algunos aspectos deficientes originados por su ímpetu, como el de cometer infracciones innecesarias, en tanto Solari y Soto, estuvieron muy atentos y aunque no tuvieron muchas oportunidades para desplegar su trabajo en ataque, dejaron todo en la disputa de cada pelota.

Esa firme tarea, sumada a la mejor perfomance del uruguayo Arévalo Ríos en Racing, en una posición más cerca de la línea de fondo , donde se lo vio más seguro en la recuperación y en la distribución de pelotas, acompañado por el “Pulpo” González, que sin llegar a brillar, impuso su presencia en cada disputa del balón y por Zaracho, el chico que sorprende por su atrevimiento, aunque esta vez no entró tanto en juego.

Y adelante Triverio, un jugador que sabe rebuscársela solo, que usa bien el cuerpo y estuvo a punto de convertir en una de las muy pocas llegadas de Racing, cuando recibió de “Licha” se saca de encima a su marca y lo cerraron justo al patear en el área chica.

Por último Lisandro López, de quien ya no se puede hablar de otra cosa que no sea de admiración, porque su “liderazgo” está respaldado no solo por su entrega, por su ganas y su guapeza, sino también por su juego, siempre claro y en cualquier lugar de la cancha.

Y en este sentimiento de hincha que uno tiene, digo, después de ver su trabajo en los últimos encuentros, que en “Licha” Racing encontró el enganche, porque hace todo bien, porque tiene pausa, aceleración y pase, sabiendo que para que esto sea real, Cocca debería dejar de lado la línea de cinco, ubicando un delantero más junto a Triverio, y de esa manera liberar a Lisandro López para juegue suelto delante del “Pulpo”, Arévalo y Zaracho, algo que por ahora no creo que suceda.

Bueno, es solo el pensamiento de un hincha, entendiendo que de esta forma podríamos tener un volante-conductor que además tiene llegada al gol.


Hasta pronto.