domingo, 21 de febrero de 2021

La imagen del desencuentro.

El empate no conforma a nadie, sobre todo porque la balanza se inclina más para el lado de la derrota que del triunfo.

Obviamente acepto y no dejo de lado, que todavía no se ve la mano del técnico en el andar del equipo (como si se pudo observar en Aldosivi), pero creo que por encima de eso, hay un muy bajo nivel individual, sobre todo en los jugadores que ya tienen un tiempo en el equipo.

Por eso hasta los rivales de menos envergadura se le atreven incluso en el Cilindro, porque saben que Racing, salvo Arias, no viene funcionando bien en ninguna de sus líneas, con una defensa dubitativa, con volantes que no generan juego ni marcan y con una ofensiva muy debilitada, lo que lo presenta como un equipo frágil.

De ahí el primer tiempo con Aldosivi que parecia un video del partido anterior, con un andar pobre en todo sentido, corriendo sin ton ni son detrás de la pelota y llegando siempre tarde a las marcas, mientras los marplatenses se lucían con un juego simple pero de toque certero y que llegaban al gol en una jugada que desnuda  la confusión en las marcas de la defensa académica.

Racing era pura impotencia, donde no se rescataba virtud alguna, solo esperanzado en alguna pelota parada o tiro libre de un Rojas intermitente, al que le cuesta cada vez más mostrarse como un volante conductor de equipo.

El segundo tiempo comienzan los cambios y la entrada de los chicos nuevos y de Alcaraz les dieron al equipo un envión anímico que por lo menos le permitió ir a buscar el gol con más entusiasmo, que logró primero a través de  Copetti con un buen cabezazo y de Chancalay, que comenzó a conectarse mejor y que finalmente termina logrando el empate con un buen gol de tiro libre.

Racing es la imagen del desencuentro, con jugadores desorientados que deambulan sin convicción alguna por el campo de juego, por lo que hay mucho que trabajar para revertir esta situación. 

Con sus declaraciones, Pizzi se muestra como una persona franca con palabras que reflejan la verdad de lo que todos vimos, hecho que como hincha valoro, por lo que espero encuentre lo antes posible un once que pueda no solo interpretar su idea, sino mejorar colectivamente en todo los aspectos del juego para volver a ser un equipo que genere expectativas.

Hasta pronto.


1 comentario:

Marcos dijo...

Opino que lo de "falta de tiempo de trabajo" se acepta más para cuestiones a pulir una vez que ya haya una idea de juego. Y eso Racing no lo tiene, y es algo que un DT puede transmitir y definir desde el primer entrenamiento. Para ser más claro, un DT puede venir y decir "quiero un equipo que presione, que siempre muestre alternativas de pase y que tengamos un 9 plantado entre los dos centrales", por ejemplo, y lo que queda después es pulir eso, con jugadores que entiendan más y mejor el mensaje, que técnica o físicamente sean los más aptos e ir corrigiendo el funcionamiento porque es obvio que eso sí lleva un tiempo, pero no veo claro ni siquiera qué pretende Pizzi del equipo y me parece preocupante. Ojalá la inserción de los refuerzos le de a Pizzi lo que busca.
Buen blog. Saludos.