Un Racing condicionado por sus antecedentes negativos en la Copa Argentina, pudo alcanzar el triunfo y romper con esa racha.
Pero no
fue un trámite sencillo, esta vez sorpresivamente agravado por el increíble
error de Gabriel Arias antes del minuto de juego, que le dio a San Martin de
Formosa la posibilidad de ponerse en ventaja y le agregaba a Racing un carga
más, a esa pesada mochila que lleva sobre sus hombros en esta copa, llena de
comienzos desfavorables.
La
incógnita era ver como reaccionaba el equipo a ese golpe y la sensación que
daba era como que se mostraba inseguro e irresoluto, con jugadores estáticos,
quizás por su propia impotencia para lograr superar a un modesto equipo
formoseño, que con bastante lógica, se dedicaba a defender esa ventaja
obtenida.
Si bien Racing
tenía la tenencia total, pero al equipo le faltaba creación, por lo que la
pelota siempre volvía a los centrales, muy dubitativos e imprecisos, dando la
sensación no estar metido, la cosa es que pasaba el tiempo y no había jugadas
claras ofensivas, solo algunos tiros de esquina que aunque a veces eran ganados
de cabeza, nunca llevaron peligro cierto.
Después de los veinte reaccionó un poco porque Cardona entró más
en juego, con un tiro libre exigió al arquero y un buen pase suyo para Reniero
que la baja bien termina con un remate desviado aunque con un buen toque
pone a Moralez frente al arquero, pero Maxi, incómodo, le da de derecha y
sin fuerza (no entiendo porque no le pegó con la zurda
Cuando ya
se iba el primer tiempo llega el gol de Opazo, que comenzó a pasar con mucho
criterio al ataque, quien después de recibir de buen pase de J. Gómez, con un
remate cruzado al segundo palo logra el empate que le permitía a Racing encarar
un segundo tiempo más animado, buscando no llegar a los penales.
Era muy
parecido el trámite, pero hubo algunos movimientos, como el de Cardona que abandonó
su posición estática en la izquierda y pudo entrar más en juego como lo hizo a
los 18 minutos cuando picando como nueve recibe un gran pase de Moralez, que controla muy bien en el punto penal y que
en lugar de rematar es generoso con Reniero para que convierta, pero el disparo
de este es tapado con el pie por el arquero Correa.
San
Martín defendía como podía, pero el tiempo pasaba y entonces los cambios para
dar vuelta la historia, salen Gómez, Reniero y Cardona, entran Rojas, Guerreo y
Carbonero, minutos después Hauche reemplaza a Moralez.
Racing
comenzó a tener más peso ofensivo, por la categoría y la característica de los jugadores
que entraron y faltando cinco minutos hay un buen pase de Hauche para Opazo que
llega al fondo y su centro atrás no puede ser controlado por el arquero Correa,
situación que aprovecha Gabriel Rojas para concretar el gol que le daba la
ventaja a Racing.
Ya
estaba, San Martín no tenía más fuerzas y Racing continuaba buscando el tercero
que llega después de un remate excelente de Rojas que pega en el palo derecho
del arquero y vuelve hacia el centro del área donde Guerrero de cabeza señala
su primer gol con la camiseta de Racing y el tercero del partido.
Fue un triunfo con efectos “laterales” positivos,
porque a uno y a otro lado de la cancha Opazo y Gabriel Rojas fueron lo mejor
del equipo y sus goles llevaron a Racing a dar vuelta el resultado.
Creo que
los cambios excesivos y el rápido e inesperado gol en contra, hicieron que el
equipo jugara lleno de dudas e imprecisiones, frente a un rival que solo opuso
la voluntad como resistencia, pero por suerte finalizó con la victoria buscada,
que ojalá sirva para despejar fantasmas y aclarar las mentes.
Hasta
pronto.