Racing le ganó a San Lorenzo y clasificó entre los cuatro primeros de la zona A, jugando un muy buen partido y sin depender de un milagro.
El equipo que volvió a presentar mayoría de jugadores
que lo hicieron ante San Pablo, comienza a dar señales de mejoría partiendo de su
mejor condición anímica, una gran actitud para presionar y luchar en todos los
sectores de la cancha, mayor solidez en defensa, un mejor manejo en el medio
campo y más presencia y agresividad en la ofensiva.
Racing fue el dominador del partido hasta los veinte
minutos del segundo tiempo, donde por los cambios, por el cansancio y quizás por
la ansiedad de defender lo que lo estaba clasificando, fue bajando su dominio,
lo que animó a San Lorenzo a ir a buscar el gol que lo clasificara a través de
centros y/o pelotas paradas para lo cual ubicó más delanteros, pero el equipo de Pizzi, comprometido y concentrado, supo
responder hasta el último minuto, donde incluso pudo aumentar el marcador si
Lovera hubiera habilitado a Copetti.
Hubo en general un buen rendimiento, pero a mi gusto los más sobresalientes fueron el superlativo Gabriel Arias, un recuperado Domínguez, el incansable Mena, un Miranda que vuelve a ser importante y el rápido y oportuno Chancalay que se convirtió en goleador y figura.
Un
triunfo que nos devolvió la sonrisa, no solo por el resultado
y la clasificación, sino porque pudimos ver nuevamente un mejor funcionamiento del equipo, lo que nos
lleva a sentirnos un poco más esperanzados para los próximos enfrentamientos.
Vamos Academia!