La famosa frase “la
unión hace la fuerza” que utilizan algunos países en sus escudos y otros como
lema nacional, me vino rápidamente a la memoria cuando veía a Racing “trabajar”
el partido contra River.
Era una expresión futbolística no muy agradable a la
vista, pero una idea al fin , donde la actitud, la solidaridad y la
inteligencia hicieron que la estrategia trabajada por Cocca y el plantel durante
estos 15 días, fuera llevada a cabo con la concentración y el orden necesario
para desorientar totalmente a un River, que como corrido de su carril, careció
totalmente de claridad y su dominio nunca llegó a preocupar a Gómez, hasta
faltando 15 minutos, donde consiguió esos goles que hicieron que sufriéramos hasta
el final.
Por eso fue un triunfo justo, porque Racing no solo ganó en el resultado, sino
también en la idea, que llevó a River a disputar el partido como quiso la
Academia, es decir un encuentro más peleado y luchado que bien jugado.
Por supuesto que dentro de todo este esfuerzo de
conjunto y donde todos se entregaron al máximo, hubo un jugadores más
destacados, como Acuña incansable y convirtiendo un gran gol, junto al encendido e inclaudicable Lautaro y su olfato goleador, que lo lleva a convertir de rebote ,
pero en general hubo un buen desempeño del resto, especialmente en defensa que
era el talón de Aquiles del equipo.
Es claro y evidente que Gómez parece sentir la
responsabilidad de cubrir el arco racinguista, donde todavía no mide bien los
tiempos que marcan cuando salir o quedarse en la línea, sobre todo en el final
cuando se lo pudo observar muy nervioso, pero es lo que tenemos y hay que
alentarlo para que supere estos primeros momentos que son los más difíciles.
De los laterales me gustó más Insúa que Pillud, y de
los centrales creo que Barbieri tuvo una muy buena actuación, que además coronó
con un buen gol de cabeza.
En el medio campo además del “Huevo”, y con este
esquema se vió un mejor pero un más bajo “Pulpo” González estuvo activo pero
más dedicado a la marca que a subir acompañando a los delanteros.
Racing ya había perdido a Licha López en el primer
tiempo, reemplazado por Brian Mansilla que estuvo a la altura, pero en el
segundo tiempo y cuando Racing estaba mejor que River y ganando por 3 goles de
diferencia, la salida de Lautaro le resta un alto porcentaje de profundidad y preocupación
para la defensa millonaria, que sumada a la lesión de Acuña, termina por
quitarle al equipo la fuerza que preocupaba en cada contragolpe.
Pero este gran triunfo de visitante y sobre todo en
Nuñez, carga nuevamente la batería anímica para los partidos que vienen,
aunque preocupa la lesión de Lisandro, que esperemos no sea nada grave.
Hasta pronto