domingo, 28 de septiembre de 2014

Creer en si mismo.


Un triunfo en Córdoba que sigue ratificando la levantada del equipo.
Sin llegar a ser brillante vuelve a dar vuelta un partido que a los 8 minutos ya perdía, porque hubo desatención en la marca del “picante” Pereyra quien pateó solo ante un Saja que solo miró sin oponer ninguna resistencia.
Un nuevo desafío le presentaba el destino. Otra vez dar vuelta un resultado.
Y Racing reaccionó.
Comenzó a acercarse al arco de Olave y Milito desperdició una oportunidad para empatar, pero a los 16 minutos, una habilitación desde la mitad de cancha sobre la izquierda del área encuentra a Bou que cabecea fantástico y clava la pelota en el ángulo.
Empate y quiero más.
Racing había salido del shock inicial y controlaba el partido.
Cerca de los 25 minutos y luego de una muy buena jugada con varios toques, el Diego de Racing llega al fondo sobre la izquierda y levanta un centro que Olave trata de despejar cayéndole  la pelota a Acuña quien convierte de cabeza.
Se había logrado lo más difícil, pasar a ganar el partido lo que puso muy nervioso a los cordobeses, quienes comenzaron a jugar muy fuerte y hasta descontrolados, lo que determinó que unos minutos después sea expulsado Barrios.
Bou contó con otra oportunidad como para aumentar pero que finaliza muy mal.
El segundo tiempo encontraba a Racing con un jugador más pero no sé, si fue debido al cansancio por el esfuerzo de jugar casi dos partidos y medio en seis días, comenzó a entregar el campo a su rival, quizás esperando encontrar espacios para contraatacar y liquidar el partido.
Y las tuvo, aunque fue riesgoso, porque la diferencia era un solo gol y en las jugadas que pudo haber aumentado el marcador, se fallaba o decidía mal.
Los cambios parecían darme la razón, cuando a los 15 minutos entra Acevedo en lugar de Milito y antes de los 30,  Voboril por Aued.
Hasta que por fin a los 35 minutos, un saque de Saja llega a la zona de Bou, quien le pone bien el cuerpo a su marcador y cuando sale Olave define con clase por sobre el arquero.
Golazo de BOU para el tercero de Racing y…vuelta de pulsaciones a nivel normal.
Pero el que seguía alterado era Belgrano, quien cada vez más nervioso, sufre una nueva baja cuando expulsan a Pereyra, mientrasen Racing la lesión de Saja trae aparejado el tercer cambio dejándole su puesto a Ibañez.
Cerca del final y con todo Belgrano jugado al ataque, Acevedo habilita a Acuña, quien guapea ante los centrales enfrentando a Olave que cubre su primer disparo, pero en el rebote convierte el cuarto gol.
Es un acierto haber encontrado en Acuña y Centurión los dos volantes por afuera, que se destacan por ir al frente –aun soportando golpes arteros-, por tener actitud, por ser punzantes, por buscar el desequilibrio y por tener presencia en el área, aunque a veces tropiezan con su mismo ímpetu.
De contar con dos volantes centrales como Videla y Aued que no declinan su andar, trabajan mucho en la recuperación y tratan de que la pelota circule correctamente, aunque hoy Videla no estuvo tan acertado.
En el trabajo de Lollo, convirtiéndose por momentos en una muralla, quien junto a un Cabral cada más asentado, le dan solidez a la zaga central, algo que todavía no se ve en los laterales.
De poder disfrutar de Milito donde su jerarquía queda expuesta en cada movimiento y de la actualidad de Bou –inesperada por cierto, pero bienvenida al fin- quien parece mostrarnos una faceta que no conocíamos regalándonos cinco goles en una semana.
Quizás solo falte que Saja vuelva a recuperar un poco su nivel inicial.
Pero bueno, disfrutemos de esta auspiciosa semana y de una goleada que anima, fortalece y lleva una sonrisa a todos los que amamos a Racing, lograda por un equipo que ha empezado a creer en si mismo y que ha comenzado a cultivar carácter partido tras partido.  
Ahora nos toca a nosotros, los hinchas, tener fe en este Racing, porque en nosotros ya creemos.
Si seguimos así,  hay esperanzas de buena cosecha.

Hasta pronto.


viernes, 26 de septiembre de 2014

¡QUE BOUENO RACING!


Después de ver el partido lo primero que pensé después de esta inmensa alegría fue, se puede.
Porque me parece que el equipo ha tenido un cambio mental y eso se comprobó en como disputó los partidos ante Newell’s y ante Boca.
Hoy un partido difícil de analizar en una cancha, que aunque estaba mejor que en el encuentro suspendido, se veía muy rápida, pero además porque no había mucho tiempo como para pensar, sumándole los nervios y la ansiedad lógica por todo lo que implicaba
sacar a flote el encuentro.
Fue un planteo razonable de Cocca el presionar permanentemente y el de atacar por afuera llenando de centros el área de Boca, que presentaba una frágil línea de fondo, algo que podían aprovechar muy bien Milito y Bou.
Es evidente que Milito genera en los rivales una preocupación especial y en sus compañeros una gran confianza, porque su juego muestra una jerarquía diferente.
Avisó a los dos minutos cuando convierte y le anulan el gol por posición adelantada y pocos minutos después, en el área grande le baja la pelota con el pecho a Bou quien convierte el empate.
En este planteo tuvo un muy buen desempeño Acuña quien se mostró punzante por la derecha y siempre complicó a sus marcadores, así fue como cerca del final del primer tiempo, un centro suyo sobre el área es cabeceado nuevamente por Bou concretando el segundo gol, que sería finalmente el del triunfo.
Caso contrario pasaba con Oroz en la izquierda quien salvo un par de toques interesantes, nunca se pudo concentrarse en el partido, seguramente porque no tiene la característica de los jugadores carrileros, porque habitualmente juega de enganche y porque como todo jugador creativo carece de esa predisposición a la marca.
También era esperable que en el segundo tiempo, Boca buscara de cualquier manera arrinconar a Racing, sobre todo en su cancha y con el resultado adverso, por lo que los cambios de la ribera de delanteros por defensores comenzaron desde el inicio del mismo.
Mientras tanto Racing continuaba igual, cuando a mi gusto  pienso que Oroz debería de haber salido al terminar el primer tiempo, porque no cumplía ni la función de marca ni la de enlace.
También me pareció que no era Acevedo, sino Cerro que tiene más dinámica, quien debería haber entrado por el chico aunque quizás lo que buscó fue con el ex Defensa y Justicia frenar el ímpetu de Boca teniendo un poco más la pelota.
Pero todo era nervio y desesperación lo que provoca la entrada de Nico Sanchez y Voboril, ante la total posesión de la pelota a los locales.
Lluvia de centros en el área de Racing, donde Saja cumplió una actuación correcta y todos los defensores estuvieron concentrados, descollando Lollo quien tuvo un muy buen partido.
Nuevamente buen partido de los volantes por adentro Aued y Videla con entrega y actitud para jugar este tipo de partidos.
Aued agregándole un poco más de juego, demostrando que ya no le pesa esta gloriosa camiseta y Videla, aunque por momentos se desordena exhibe lo que veníamos exigiendo hace tiempo: presencia y carácter en la mitad de cancha.
El equipo está encontrando en Lollo, Videla y Milito la columna vertebral que hace mucho no tenía.
Solo falta que Saja vuelva a su nivel futbolístico y anímico, lo que posiblemente pueda comenzar a retomar a partir de estos dos últimos encuentros, en lo que parece que Racing ha comenzado a tomar confianza convencido de que se puede mejorar.
Para Bou un reconocimiento de quienes – y me incluyo – no le teníamos nada de confianza y hoy ha cumplido con creces logrando lo que creo ningún hincha esperaba.
Hacerle dos goles a Boca y en la Bombonera!
Por eso vaya para él, para sus compañeros del plantel y cuerpo técnico este
¡QUE BOUENO RACING!  
Por haber logrado este triunfo y por cortar con esa pesada carga de que no se podía dar vuelta un resultado.
Porque Racing logró algo más importante que un triunfo.
Fue darse cuenta que se puede y este, es el momento de ir por más.



Hasta pronto.


martes, 23 de septiembre de 2014

Generador de energía.


Cada partido de Racing parece ser un encuentro bisagra.
Y este era para ver si el técnico continuaba, para cortar una racha de derrotas y para que los jugadores le demuestren a su hinchada que si no pueden ganar, por lo menos tienen actitud dejando todo en la cancha.
Y en una noche bastante agitada para el plantel y el técnico, Racing jugó posiblemente su mejor partido en la era Cocca y fundamentalmente porque lo hizo ante un muy buen equipo que está peleando la punta y que siempre propone buen juego y tenencia de pelota.
Pero Racing había comenzado recibiendo otro cachetazo a los 10 minutos cuando Scocco marca el gol ante una mala sincronización de la defensa académica
Malos pensamientos en todos los hinchas, ya que con los pésimos antecedentes que el club carga en su espalda ante un resultado adverso, nada hacía prever una remontada importante para por lo menos empatar.
Y fue a partir de allí que, especialmente Videla, y Aued,  encendieron el motor que impulsó al equipo hacia adelante logrando empatar Bou a los 25, con un giro y rápido disparo.
Racing encontró en Videla un generador de energía, quien con su actitud y con su entrega contagió a sus compañeros y movilizó a todos los hinchas presentes en el Cilindro.
Racing estaba para más, mejor dicho para mucho más, pero hubo malas decisiones en el pase final de las jugadas y en la definición.
Buen partido Videla quien mejoró con la pelota, de Aued, quien no debía de haber salido salvo que le molestara algo, de Cabral, que casi hace un gol heroico, de Centurión -el único del que se puede esperar algo diferente, aunque muchas las termina mal, de Hauche que tuvo varias y estrelló una en el travesaño además de que le cometieron un penal -no cobrado y van...- y correcto el trabajo de Acuña, de Bou, quien además del gol muestra por momentos interesantes movimientos y comienza a acomodarse mejor y de Saja
Flojo los laterales. Peor Grimi que Díaz.
Es evidente que el equipo carece de un juego más atildado y más vistoso, que normalmente se lo puede dar un jugador distinto con asistencias que rompan líneas para llegadas más claras, pero si no fuera por las derrotas, esta presentación diría que fue muy destacable (y sin Milito), aun habiendo empatado, lo que nos puede dar una señal de esperanza para dar vuelta el partido suspendido contra Boca y así comenzar una remontada que buena falta nos hace.
Lástima lo de Hauche.
Posiblemente no debería haberlo exigido tanto tiempo, ya que solo habían pasado 15 días desde su desgarro.
Para Cocca, una demostración de respaldo del equipo, la cual seguramente un le brindará un poco de paz, después de tantas semanas de turbulencia.
Impresionante el apoyo y aliento de la hinchada, que esta vez tuvo reciprocidad en el equipo que desde el campo de juego, le hacía llegar con su actitud y su esfuerzo tratando de buscar el triunfo hasta el final.

Hasta pronto.


domingo, 21 de septiembre de 2014

Instalado en la mediocridad.



¿Que fue de aquel Racing grande que hasta los años sesenta era respetado por todos?
La Academia Racing Club era un club grande de verdad porque sus dirigentes lo eran, porque sus técnicos y sus planteles lo eran y porque su hinchada lo era.
Época gloriosa. Inolvidable para quienes tuvimos la suerte de vivirla.
A partir de los setenta  nos fue invadiendo la decadencia, salvo mínimos logros que podemos contarlos con  los dedos de una mano.
¿Tan pocas eran las convicciones y ambiciones de  los dirigentes – que no dejan de ser hinchas de Racing- y tan equivocados fueron sus conceptos al elegir técnicos y jugadores que pasaron por la institución para llegar a tantos desaciertos…?
Como no han entendido que para ser un grande hay que pensar como grande.
Acepto que el país vivió momentos difíciles en lo social y en lo económico que han influido en algunas administraciones, pero tantos años de errores, me hace pensar que han existido otros pormenores que llevaron a Racing a una bajeza institucional que da pena recordar.
Para volver a ser grande hay que tener mentalidad de grande, para poder pensar en grande, desde la palabra y desde la acción.
Para entrar en tema me voy a referir a una faceta de Boca.
A través de muchos años sus dirigentes han logrado imponer el “Deportivo ganar.” logrando generar conciencia ganadora desde el hincha hasta los técnicos y jugadores que tienen aspiraciones de llegar al club de la ribera.
Concepto triunfador del que Racing hacía gala en aquellos tiempos lejanos y que hoy de alguna manera parece que solo conserva el hincha.
Porque  en los últimos cuarenta años, no recuerdo haber escuchado a un Presidente nuestro decir con firmeza que en Racing hay que ganar todo lo que se juega y lo único que han conseguido es haber instalado en la mediocridad al fútbol profesional, convirtiendo a nuestra querida Academia en el club del “más o menos”, porque nada se hacía muy bien, como lo indican las masivas pero mediocres contrataciones de jugadores y lo certifican la mayoría de sus modestas campañas, salvo honrosas excepciones en ambos casos.
Y la grandeza institucional y deportiva de Racing sufrió un gran deterioro, atreviéndome a decir que si no fuera por la perseverancia y mentalidad ganadora de su hinchada, quienes se retroalimentaron en medio de ese deterioro para hacerle frente al abandono y a la rendición que los acechaba, hoy estaría casi en el olvido o deambulando en alguna de las categorías menores.
Pronto habrá elecciones, y creo que sería un momento propicio para comenzar a escuchar esas mensajes firmes de los futuros dirigentes desterrando  los tibios “Si hacemos 30 puntos es un buen campeonato, vamos a ver si podemos estar entre los cinco primeros o no estamos para salir campeones…”
Pero no como un lema de campaña o para quedar bien con el hincha y sobre todo con el hincha-socio que lo puede llegar a votar, sino con total convicción, como algo visceral, para que cada vez que hable de Racing el hincha lo pueda ver reflejado en cada gesto, en cada palabra y en cada acción.
Y desde la Comisión Directiva acertando con las contrataciones del técnico y los jugadores, quienes deberán tener como premisa fundamental entender que han sido contratados para ganar todo lo que se compita dejando la piel en cada compromiso. 
Así se inculca, se siembra y se comienza a generar una mentalidad ganadora que quizás nos permita retomar el camino que nos lleve nuevamente a ser grandes de verdad.



Hasta pronto.



viernes, 19 de septiembre de 2014

Diferente pero parecido.


Se habló de que debía jugarse como una final porque era un partido definitorio en la Copa Argentina y que ganándola se accedía bastante rápido a la Libertadores, pero que además servía para cortar la racha de derrotas y tomar impulso para enfrentar el lunes a Newell’s Old Boys con otra expectativa.
Lamentablemente no fue así después de ver este partido, donde Racing no mostró  ninguna señal positiva para tener esperanzas de ganarles a los rosarinos.
Porque carece de dos conceptos fundamentales.
No elabora juego y no tiene gol.
El primer tiempo fue de Racing porque presionó a un Argentinos lento y con menos descanso ya que venía de jugar un día después y daba la sensación de que se lo iba a llevar por delante, pero fueron  más ganas que otra cosa y terminó tirando pelotazos desde el fondo para un Castillón desacertado y distraído que hizo todo mal,
mientras Bou en esa primera etapa jugaba su mejor partido.
Por la derecha Villar acompañaba pero aportó poco y resolvíó mal y Centurión fue el único que intentó con un buen comienzo, pero que en los últimos quince quedó fuera de acción, olvidado sobre la izquierda.
Poco como para lastimar a una defensa que daba ventajas.
Solo aproximaciones.
En el medio Videla trabajaba bien y Aued ayudaba más arriba aunque no estuvo tan claro como otras veces.
Atrás bien Pillud subiendo y correctos Lollo, Sanchez y Grimi, aceptando que nunca fueron muy exigidos.
Pero el segundo tiempo fue distinto y creo que el cambio obligado de Gómez por Pillud le dio la posibilidad a los “bichitos” de agrandarse, porque fue de lo peor que vi en mucho tiempo como marcador de punta con y sin la pelota.
A partir de allí Ramirez que había sido bastante bien controlado en los primeros 45’ creció ante las facilidades de Gómez y fue una de las piezas claves para el mejoramiento de Argentinos.
Realmente Gómez estaba en otra cosa y de allí viene el gol con un tiro libre donde Saja tiene mucha responsabilidad también a pesar del gran disparo de Riquelme.
El equipo de La Paternal comenzó a imponer su ritmo ante un Racing que entraba a  deprimirse y a desordenarse a medida que pasaban los minutos.
Los cambios solo fueron para cumplir.
Acuña tirando centros a cualquier lado para jugadores que quedaban permanentemente en posición adelantada ( sin mirar donde estaban posicionados ) y con un Rentería sin ritmo, haciendo lo que podía
Después la expulsión de Aued y el final sin pena ni gloria.
Este fue un Racing diferente pero parecido a aquel de Mostaza Merlo.
Diferente por los jugadores nuevos y parecido porque repitió conceptos de aquel equipo que salió último. Pelotazos desde el fondo,  falta de ideas de juego asociado y poca fuerza anímica para darlo vuelta.
Un Racing que comienza a dejar al desnudo los pocos recursos de algunos de los futbolistas que se incorporaron, poniendo al descubierto que el plantel no cuenta con los  intérpretes adecuados para las ideas que el técnico vuelca a sus dirigidos, por lo que se supone deberá encontrar otra forma de juego, hasta que Hauche (que en este equipo parece ser Cristiano Ronaldo) y Milito puedan volver, rogando que ahora que no se pelea por casi nada, salvo un puesto decoroso en el torneo, no los apure y permita que se recuperen muy bien.
Porque Bou no es Milito y Castillón no es Hauche
Por último una línea sobre la actualidad de Cocca:
Expresé en un twitter que si Racing perdía el clásico comenzaba el principio del fin de Cocca y en este blog hablé de lo que normalmente afectaba en el futuro  a quien lo perdía.
Pero pienso que hoy por hoy -a pesar de la bronca,- sería un error conceptual que Cocca no continúe por varias razones:
1.      Hay elecciones en 3 meses y sería coherente que el Presidente electo decida su continuidad o reemplazo.
2.      En el caso de que se lo reemplazara quien llegue sabe que tiene el puesto atado con alambre ya que las nuevas autoridades pueden no estar de acuerdo con su designación.
3.      Si el supuesto nuevo DT pierde los mismos partidos que su antecesor, debería ser reemplazado, tal cual se lo haría con Cocca.
4.      Fuera de la Copa Argentina y lejos del campeonato ya no peleamos nada.
Por todo esto digo, que aunque no esté de acuerdo con él, de que el representante tuvo injerencia y que varios de los jugadores no responden a las exigencias que demanda vestir la camiseta de Racing, Cocca debería ser mantenido en el cargo hasta el final de este torneo.
Luego Dios dirá.

Hasta pronto.






lunes, 15 de septiembre de 2014

Juego contra natura.


Desde ya que antes del partido, el campo de juego ya no estaba en condiciones.
Menos al finalizar el primer tiempo y peor cuando lo suspendió.
Pero claro, es Boca y con la cancha llena de gente.
Quizás no vale la pena analizar este partido, pero por lo menos quiero escribir lo que vi.
Racing comenzó como queriendo un poco más y salió a presionar en la mitad de cancha y a los 3 minutos, un centro de Grimi fue cabeceado de gran forma por Bou pero los palos le negaron el gol.
Después Boca reaccionó pero no llegaba al arco de Saja – por supuesto tampoco Racing aunque tuvo un par de tiros de esquina-  porque a los jugadores cada vez les costaba más jugar en un campo que iba mostrando su peor piso.
Y Racing empezó a mostrar algunos contratiempos, fundamentalmente en la demora de los rechazos lo que le dio a Boca la posibilidad de tener la jugada donde convierte el gol.
Hubo jugadores que parecieron no entender el juego en un campo lleno de agua
( Cabral y Videla abusando de tener la pelota y no deshacerse rápido  ) y otros jugadores que no supieron resolver alguna posibilidad por individualistas o por no saber que hacer para llevar peligro al arco de Orión ( Díaz, Castillón y Acuña ).
En ese aspecto pero me parece que Boca tuvo “más potrero” en sus jugadores para entender como se juega en una cancha en esas condiciones ( ver en el gol como Meli la empala, y Carrizo toca rápido para Calleri, aunque en honor a la verdad Cabral se equivoca porque se demora, pero también digo que Calleri lo toma de la camiseta y es falta, antes del gol.)
Es como que Racing necesitaba un tiempo más para jugarla en lugar de hacerlo primera.
Al comenzar el  segundo tiempo, la Academia tuvo nuevamente la oportunidad de concretar y alcanzar el empate en una pelota que Castillón se lleva dentro del área y define sin fuerza picándola por sobre Orión pero es rechazada sobre la línea y a posteriori se demora en tirar el centro perdiendo una gran posibilidad.
Indecisiones que marcan una diferencia.
Después poco y nada en un juego contra natura, hasta que a los 12 minutos al árbitro se da cuenta que no se puede seguir sobre ese campo de juego y suspende un partido donde a Racing le quedan solo 35 minutos para poder remontar el resultado, quizás ahora con la posibilidad de recuperar jugadores para la nueva fecha de continuidad.
En lo anímico posiblemente no afecte tanto al no estar finalizado el encuentro, dándole al plantel la gran posibilidad de cambiar su imagen el jueves contra Argentinos Jrs. por la Copa y el lunes contra Newell’s Old Boys en el Cilindro.
Dos triunfos que le cambiarían el ánimo y la predisposición para afrontar lo que sigue, caso contrario un panorama que hoy aparece como gris, comenzaría a teñirse de negro y donde comienza a correr riesgo la figura del técnico.
En mi caso personal y aunque el DT que yo aspiraba hoy está en Tigre ( G. Alfaro ) digo que Cocca debe continuar por lo menos hasta que haya elecciones, porque caso contrario Victor Blanco debería consensuar con los candidatos para acordar el nombre de un reemplazante.
Los hinchas de Racing hemos sufrido mucho y vivimos con mucha ansiedad cada torneo, pero alguna vez debemos recapacitar y entender que en esta oportunidad y a tres meses de las elecciones hay que permitir de una vez por todas que el presidente electo sea quien decida la continuidad o no del técnico actual.
Hasta pronto.






lunes, 8 de septiembre de 2014

Plano inclinado.

Con bronca porque creo que fue una derrota injusta, trataré de separar los temas que hacen que Racing se encuentre en una situación muy complicada y que pienso, nació con la pérdida del clásico, al cual hice referencia el viernes en este blog.
Uno de ellos es el árbitro y sus decisiones erróneas, si se quiere similar, al del clásico, lo que evidentemente influyó en el resultado, ya que por ejemplo, en la jugada anterior al penal que le da a Lanús, hubo una falta dentro del área a Centurión que no cobró.
Conclusión: Si hubiera sido penal para Racing, el penal del Lanús no llegaba.
Pero eso no fue todo, ya que hubo dos manos más en el área de Lanús que no fueron observadas por este juez quien le fue agregando al encuentro fallos inciertos durante todo el partido, enardeciendo a los hinchas y generando un creciente nerviosismo que llegó rápidamente a los jugadores.
El otro tema es el equipo en cuestión.
Hoy comenzó casi ganando desde el vestuario, porque al minuto de juego y tras un pase muy bueno de Hauche (digno de Riquelme), Centurión definió en forma excelente.
Después de unos minutos de entusiasmo Lanús comenzó a adelantarse y la pelota a dividirse, sin que los arqueros tuvieran mucho trabajo.
Pero a  Racing le costaba generar jugadas claras, algo que no es circunstancial sino que es lo que viene careciendo desde el primer partido, algo que se fue agravando desde la salida de Milito.
Reconociendo que el equipo tuvo actitud y valentía y en muchos momentos del partido arrinconó a Lanús, también debemos decir que llegó por los costados, sobre todo el derecho y que mejoró muchísimo en el segundo tiempo al entrar Aued por Acevedo, sus posibilidades de gol fueron por tiros de media distancia, a los que respondió muy bien el arquero granate.
Con la creación ausente, el equipo se convirtió en una especie de vendaval, donde resaltó la entrega de los jugadores destacándose la lucha y la garra de Videla.
Pero a medida que pasaban los minutos todo se iba haciendo más confuso donde se entremezclaba el fervor, la angustia y la bronca de un plantel que sintió que nuevamente era perjudicado.
Racing se encuentra ahora en un plano inclinado peligroso, donde conjugan las dudosas labores de los jueces y un equipo con pocas ideas y tocado espiritualmente por las derrotas y por las bajas que se van sumando, por lo que el cuerpo técnico deberá encontrar rápidamente respuestas de donde aferrarse para no seguir en caída libre.
Obviamente reflexionar más sobre el partido sería caerle a Cocca por la demora en darse cuenta que Aued debe estar en cancha, que Boud hace lo que puede pero no muestra señales de ser la solución, que Castillón corre pero todo es irregular, que nadie pone un pase de gol entre líneas, salvo el que hizo hoy Hauche, -quizás del que menos se esperaba- o que cuando dijo que no consiguieron volante de creación, también leímos declaraciones de Buonanotte diciendo que no vino porque el técnico no lo quería, pero ya es tarde.
Ahora hay que pensar como jugarle a Boca “sin delanteros”.
Me atrevo a decir que hay que llenarle la cancha de volantes y propondría: a Cerro y Videla delante de la línea de cuatro, a Villar o Gastón Díaz,  Aued y Acuña delante de ellos y a Bou o Castillón o Rentería de punta.

Hasta pronto.






viernes, 5 de septiembre de 2014

Un desafío anímico.


Sucede en muchos de los clásicos del fútbol argentino.
Normalmente el que pierde sufre un bajón anímico importante que suele derivar en resultados negativos.
Por supuesto que hubo excepciones y esta no deja de ser una gran oportunidad para que este plantel de Racing demuestre que cuenta con la personalidad y el carácter necesario para convencernos de que el clásico no los afectó anímicamente. 
Si bien la seguidilla de partidos que nos espera es con equipos importantes, lo que personalmente me preocupa, es como va a reaccionar Racing ante estos compromisos dado que además de no contar con Milito, no muestra todavía como equipo la solidez y convicción necesaria que pueda generar cierta tranquilidad para afrontarlos.
Por eso Racing este fin de semana no solo juega un partido, también enfrenta un desafío anímico y en la cabeza de los jugadores y del cuerpo técnico, está la posibilidad de superarlo.
Es cierto que los hinchas nos cegamos ante esta derrota y pedimos rápidamente cambios drásticos en el equipo y desde este modesto blog lo que sí vengo sugiriendo es que Aued debería tener la una oportunidad de titular, porque no la misma cantidad de partidos que Acevedo, quien en la audición “Esto es Racing” emitida el día 28 de agosto, confesó que no estaba acostumbrado a jugar más adelantado, coincidiendo con lo que comenté en este blog después de la derrota con Tigre.
Me parece que Acevedo tiene condiciones de buen jugador y que entiende  el juego, pero Racing debe buscar algún cambio de ritmo arriba porque jugando él en esa posición todo se hace muy lento y previsible y cuando el pierde la pelota no vuelve con velocidad a la zona de recuperación.
Sin embargo Cocca insiste haciéndolo jugar en esa posición donde pierde quizás su mayor cualidad que es pasar bien la pelota algo en lo que está fallando además de no pisar el área, exigiéndose además físicamente, lo que lo vuelve impreciso, sobre todo en los segundos tiempos.
Y como de alguna manera todos jugamos a ser técnicos se me ocurrió pensar que Acevedo podría retroceder unos metros y ubicarse delante de la línea de cuatro para dividirse el centro del campo con Videla y por delante de ellos conformar una línea de tres con Centurión, Aued y Acuña y de punta Hauche, para que tanto Centurión como Acuña puedan intentar desbordar  por afuera, mientras Aued,  delante de Acevedo y Videla, actuaría como una especie de enganche tratando de pisar el área lo máximo posible.
Pero bueno estas son ideas de un hincha, como la tendrá cada uno de los que sufrimos por nuestra Academia.

Hasta pronto.