Era un partido que a priori parecía más accesible, porque Racing es sin dudas más que Cuiaba, pero el árbitro y las discusiones lo llevaron a jugar un encuentro distinto.
Racing era un cómodo dominador del encuentro y
durante los primeros veinte minutos, prácticamente se jugó en campo adversario, a
través de la tenencia de la pelota y una buena circulación de la misma,
mientras el equipo brasileño esperaba agazapado.
Pero la Academia no lograba encontrar los pases finales que posicionara a algún jugador en situación de gol, salvo cuando a los 22 minutos Fabricio Domínguez habilita a Miranda dentro del área pero su fuerte disparo fue desviado al córner por el arquero Walter.
Racing comenzó a entrar en un juego de discusiones y
eso le hizo perder concentración y claridad, dándole a Cuiaba la posibilidad de
entrar en un juego más luchado que jugado y en un contragolpe que termina en un tiro libre
en la puerta del área académica, el local logra ponerse en ventaja a través de
un cabezazo de Marllon, que estaba en evidente posición adelantada.
Eso por unos minutos, sacó a Racing del partido y
sufrió un par de situaciones que lo hubieran complicado seriamente, pero por
suerte pudo ir retomando el dominio del juego y a los 42 después de una muy
buena jugada que termina en un centro rasante de Piovi, Copetti se pierde increíblemente el empate.
Racing debía tranquilizarse para volver a confiar en sus convicciones para jugar el segundo tiempo y la charla en el vestuario pareció tener un buen efecto, porque desde el vamos el equipo fue otro y a los 2 minutos, despues de una excelente jugada colectiva que arranca con Miranda, sigue en Moreno, Alcaraz la abre el anoche imparable Chancalay, que elude a dos jugadores en el área y envía centro atrás que recibe Miranda ya en el área, quien bloqueado toca para Copetti y este de espaldas para Moreno que acompañaba, quien desde fuera del área y con un remate con comba la clava en el palo derecho del arquero.
Más que GOL...GOLAZO!!!
Racing ya era otro, porque le sumó rebeldía a la idea de juego y eso le permitió estar más seguro en un partido donde el local. iba a buscar ensuciarlo ante la permisividad de un árbitro dubitativo, pero a los 12 minutos de esa etapa, un tiro libre que Piovi, de gran tarea, ejecuta en forma excelente y con rosca al área para que Copetti, que peleó contra todos y tuvo una entrega realmente admirable, se anticipe y logre con un certero remate, su merecido gol.
A los 25 minutos comenzaron los cambios, seguramente buscando
darle más aire para tener la pelota y sacarle ritmo al encuentro, Rojas (más animado y haciendo un par de pisadas como un jugador que vuelve a confiar en si mismo) por Alcaraz y
Jonathan Gómez por Fabricio Domínguez, pero el equipo ya no tenía el orden y el despliegue inicial y además hubo jugadores que se se excedieron en tener la pelota y la perdían en zonas de riesgo, lo que le dio al Cuiaba alguna que otra posibilidad para acercarse al arco de “Chila” Gómez, que
atento respondió con seguridad en sus intervenciones, incluso sin dar rebote.
A los 30, entró Mena, que se mostró mejor
físicamente y muy metido en el partido, por Piovi, faltando pocos minutos Chancalay le dejó su lugar a Correa (que tuvo una gran oportunidad sobre el final del
encuentro pero no supo como resolverla) y Neri Domínguez reemplazó al incansable Copetti.
Respecto al equipo titular, estuvieron seguros “Chila”, Sigali e Insúa, irregular Mura (ya no aparece en el área rival como antes), muy bien Piovi y gran tarea de Moreno y Miranda que podrá tener bajones pero es el que la tiene más clara, enredado Alcaraz, confundido Fabricio Domínguez, GIGANTE Copetti y un Chancalay arrasador por su zona, señales de que está creciendo en su juego.
Racing logró un triunfo sumamente importante para
seguir compartiendo la punta con Melgar, con quien deberá jugar el próximo
partido por la Copa Sudamericana en el Cilindro, donde tendrá una gran oportunidad para
posicionarse como líder de su zona.
Hasta pronto.