Lo digo por otra cosa.
Racing registra un cambio en su juego, porque revolea
poco y porque está cada vez con más confianza para llevar adelante la idea de
su técnico, con un Musso que estuvo seguro, con centrales como Sigali y Donatti,
de gran personalidad, pero especialmente con un Dominguez, que hace casi todo
bien, por no decir todo, y que a mi gusto fue la figura, quien junto con Nery
Cardoso, marcan el ritmo del juego, con Zaracho, que estuvo muy activo, con Saravia
y Soto, opciones permanentes a la hora de atacar, más perseguidos por los
delanteros a quienes ellos deberían marcar, con un Centurión, que jugando libre
fue junto con Dominguez lo más destacado y con un Lautaro que hoy estuvo bien marcado, pero que siempre preocupa. (Le
anularon un gol legítimo porque estaba habilitado).
El encuentro mostraba a dos equipos que buscaban
permanentemente el triunfo, lo que lo hizo muy entretenido, sobre todo en el
segundo tiempo, pero la búsqueda del triunfo por parte del “Chacho” quedó
demostrada cuando ubica a Cuadra por Ojeda y sobre el final del partido reemplaza
a Zaracho por Triverio.
Otro técnico, posiblemente hubiera realizado cambios para sostener un empate, que quizás, hubieran sido lógicos, por eso y aun entendiendo el mérito que tuvieron los jugadores, el triunfo de Racing fue el triunfo del “Chacho”, por su
convicción y por su mentalidad ganadora, que la demuestra cuando pedía más minutos de descuento ante la
lesión de un jugador rival, empatando de visitante y ante un equipo que está
realizando un importante campaña, especialmente de local.
Me gustó y me alegró lo de Cuadra, no solo por el
gol, sino porque demostró que está para jugar, por eso nos extrañaba cuando lo
dejaban afuera del banco.
Finalmente pienso que Racing cuidó un poco el
físico, porque estos jugadores, más Lisandro, seguramente estarán el martes
enfrentando al Cruzeiro de Brasil, por eso pienso que si bien hubo presión, no fue tan constante como que se pudo observar frente a Lanús.
Hasta pronto