La Copa Argentina, una Copa que casi siempre se nos cayó de las manos antes de llenarla con triunfos, nos daba una nueva oportunidad en Santiago del Estero.
Esta vez el rival fue Gimnasia y Tiro de Salta y Racing,
con un equipo que presentó varios cambios logró el primer triunfo, que le
permitió por fin, comenzar a paladear el dulce sabor de la victoria.
Del equipo rescato el respaldo desde el juego a la
idea de Gago, pero es evidente que cuando se disponen varios cambios se afecta
el andar del mismo, quizás porque consciente o inconscientemente, el enfrentar
a un equipo del Federal “A” provoca cierta desconcentración, la que por
momentos pareció como estar “sobrando” el partido.
Tanto fue así que Piovi, un jugador de muy buen presente,
cometió varios errores que pudieron costarle caro a la Academia (llámese
situaciones de gol y hasta un empujón dentro del área).
Los más destacados fueron Jonathan Gómez, muy activo
y participativo de todo el juego, Fabricio Domínguez (me pareció una
interesante alternativa de Hauche) y Enzo Copetti a quien se lo ve más suelto,
más seguro y con más claridad en el juego, convirtiendo un lindo gol y
asistiendo en los otros dos.
Moreno no estuvo en el nivel que muestra en la Copa
de la Liga y Chancalay si bien aporta entrega, sigue exhibiendo como cierta
falta de confianza.
Neri Domínguez fue lo mejor de una última línea junto
a Pillud y Mena que sin sobresalir cumplieron, aunque se les nota la falta de
ritmo futbolístico mientras Tagliamonte que supo responder rápido y muy bien a
los errores, mostró como faceta negativa, una llamativa inseguridad al querer
salir jugando con los pies.
Después de lograr el primer gol y estar jugando un
buen encuentro en la zona de volantes Mauricio Martínez se lesiona (lamentablemente
se confirmó que fue rotura de ligamentos de la rodilla derecha, la misma que
sufrió al llegar al club) y eso llevó a Gago a enviar a Benjamín Garré al campo
de juego, a quien se lo vio más metido, con buenos movimientos, con aciertos
como, la asistencia a Copetti en el gol y la definición su gol, por lo que
espero que esto lo pueda repetir ante equipos de mayor envergadura.
El resto de los cambios y entendiendo que Gago busca
darle oportunidades a todos, me parecieron un poco apresurados, sobre todo los
ingresos de Córdoba y Quiroz por Moreno y Chancalay a los 20 minutos, si bien ya
se había convertido el tercero y todo parecía terminado, porque este tipo de
partidos de la Copa Argentina a veces trae sorpresas y los hinchas de Racing las
hemos sufrido.
Cinco minutos después Hauche y Cáceres reemplazaron
a Pillud y Copetti, pero pocos minutos más tarde descuenta Gimnasia y Tiro,
pero por suerte nada grave sucedió de allí hasta el final.
Confieso que nunca vi jugar a Quiroz, que me pareció
que tiene mucha prestancia buscando ser simple y seguro en el toque y pocas
veces a Córdoba, creo que cuando transita el medio campo debería ser más simple,
tocar más rápido (no tiene el tranco ni el arranque de Alcaraz) y su habilidad hacerla
pesar cerca o dentro del área.
El encuentro de anoche deja en claro que si bien la idea de juego está por encima de todo,
no todos la interpretan de la mejor manera, porque quienes deben llevarla a
cabo son seres humanos, como tales imperfectos pero finalmente auténticos, que en
cada acción, además de la entrega, la actitud y el convencimiento, exponen sus
capacidades con sus aciertos y sus errores, los que muchas veces definen un
encuentro.
Así y todo el camino parece ser el correcto.
En ellos confiamos.
Hasta pronto.