lunes, 15 de mayo de 2023

Una de las dos partes es culpable.

A pesar de la reunión y promesas de respaldo después del partido anterior, Gago y el plantel nos han entregado una nueva frustración frente a Platense.

Es evidente que hay una razón que los llevado a transitar por este camino lleno de derrotas y de desconcierto total, que siguen ocultando con argumentos sin contenido cierto, porque la deplorable presentación ante Platense, no hizo más que confirmar que todo lo que expresaron jugadores y técnico fueron palabras al viento, ya que en el campo de juego pudimos observar a un equipo desorientado que se iba entregando mansamente, mientras en el banco veíamos la imagen de un Gago vencido.

Un Racing sin líderes y quebrado anímicamente, parece haber entrado en una etapa pasiva, de resignación, logrando solo 1 punto en los últimos 7 partidos y acumulando 26 goles en contra en el torneo, por lo que no resiste mucho análisis.

Y así no va, porque el que sufre es el hincha, que ve partido a partido como Gago desorienta con sus formaciones y el equipo lo manifiesta con sus alarmantes inseguridades y acciones, aun en sus jugadores más importantes como Arias y Sigali.

A todo eso le podríamos agregar como detalle que a pesar de no rendir satisfactoriamente Moralez y sobre todo Cardona, no deben sentirse nada bien al ver que Gago, por encima de ellos, elige a chicos debutantes en un período de resultados catastróficos y los hace entrar faltando 15 minutos para que finalice el encuentro.

Según Gago hay problemas que corregir, pero dice que no sabe cuáles son...entonces algo queda claro, una de las dos partes es culpable, el plantel, que si de verdad lo banca, que en la cancha ponga lo que hay que poner, porque la sensación es todo lo contrario o el técnico, que sabe que el hilo se corta por lo más delgado.

Con todo respeto creo que algo se rompió entre ellos y siempre hay un motivo por lo cual sucede, aunque de ambos lados quieran soslayarlo con discursos convencionales, por lo que me parece que este ciclo, de difícil solución por estar jugando la Libertadores, está llegando a su fin y no se ven argumentos serios que puedan frenar una decisión impostergable, salvo un milagro.

Hasta pronto.


miércoles, 10 de mayo de 2023

Indefensos en la Liga.

Talleres terminó de desnudar a este Racing de la Liga, que pasó a ser el equipo más goleado.

Así como en mi comentario anterior expresé que fue acertado el planteo de Gago frente a Flamengo, hoy digo que me resulta extraño que en la Liga continúe insistiendo con un sistema de juego que no puede ser ejecutado por un equipo que ha perdido confianza y que quebrado anímicamente no responde en ninguna de sus líneas, entrando en una caída que parece no tener fin.

También manifestaba que tenía la presunción de que algo pasaba puertas adentro, lo que pero parece ser cierto por la extensa reunión en el vestuario al finalizar el encuentro entre Gago y el plantel, como una señal de disconformidad de un lado o del otro, porque este tipo de conversación normalmente se lleva a cabo en el próximo entrenamiento.

Racing vive situaciones de distracción alarmantes como la que se registró en el primer gol de Talleres, donde por estar discutiendo un fallo anterior, la defensa quedó mal parada ante el error de Hauche y no reaccionó ante la asistencia de Garro, para Santos.

Fue como pudo a buscar el empate y lo consiguió tras una buena asistencia de Oroz para Moralez quien picando en diagonal al área, enfrenta al arquero y define en gran forma, pero el VAR que está cada día menos entendible, después de varios minutos lo terminó anulando injustamente.

El partido podía haber cambiado porque el empate hubiera ayudado anímicamente a un equipo que continuaba mostrando groseros errores, como de Insúa y Sigali, en la mitad de cancha, que le dan a Santos la oportunidad de marcar el segundo gol.

El desconcierto académico con sus desaciertos y su nerviosismo le iba a seguir dando otras ocasiones a Santos con un remate que ataja Arias y a Benavidez, pero por suerte la pelota fue rechazada sobre la línea por Sigali, a todo esto Raing tuvo un intento sobre el final con Moralez que enfrentó nuevamente a Herrera, pero el arquero achicó bien y pudo tapar su disparo.

El segundo tiempo daba para varios cambios, porque salvo Oroz y Moralez, el resto no había ofrecido nada para destacar, pero Gago solo reemplaza a Mura por Pillud, que comenzó su participación con un buen centro para Reniero que cabeceó a las manos de Herrera.

Era como una señal de esperanza, pero Talleres nos pinchó la ilusión rápidamente cuando desde su área y con una pelota larga donde Valoyes le gana a Opazo, toca para Santos, quien se la pone por encima de Insúa, para que el colombiano enfrente Arias y convierta el tercero.

La velocidad de los jugadores de Talleres hacían estragos en cada avance como pasó cuando Moralez falla en su pase y Franco le saca varios metros por la izquierda, la cruza a la derecha para Santos, pero su remate por suerte se va afuera, era como que el equipo cordobés se apiadaba de un Racing que insistía tibiamente hasta que llega una jugada donde Pillud como interno por derecha, engancha y desde fuera del área de zurda la clava en el segundo palo de Herrera.

El golazo de Pillud fue como un aliciente y Gago envía a la cancha al chico Baltazar Rodríguez por Hauche, pero un nuevo golpe de Talleres nos volvió a mostrar la realidad, otra vez pelotazo para Valoyes que van a cabecear Insúa y Opazo y como si fuera un blooper chocan entre ellos y se la dejan servida al colombiano, que solo ante Arias por suerte define mal.

Cada gol perdido de Talleres no dejaba de ser un incentivo para este empobrecido Racing, que trataba de encontrar la forma de llegar al arco rival con Saliadarre por la derecha, que comenzaba a ganarle el duelo a Pasquini y Baltazar Rodriguez por izquierda y en unos minutos el equipo provocó lo que nadie esperaba, un disparo de Reniero a las manos de Herrera, un centro llovido de Moralez que finalmente Oroz de zurda lo convierte en gol y la posibilidad del empate en los pies de  Baltazar Rodríguez, pero su remate se fue desviado.

Mientras Talleres se veía sorprendido, Racing ya estaba jugado pero Sosa gana una pelota y lo supera en velocidad a Sigali, quien lo corre de atrás y en mi modesta forma de ver, erróneamente se apresura a cometerle penal al entrar al área cuando no sabía que podía pasar, que Valoyes transforma en gol.

Gago busca lo imposible primero Cardona por Avilés y faltando diez minutos con los juveniles Román Fernández por el agotado Saliadarre y Catriel Cabellos por Maximiliano Moralez, pero ya nada modificaría la noche negra de Racing porque la impotencia iba en aumento y si bien Racing pudo descontar a través de Romaán Fernandez, debemos aceptar que Talleres con Sosa, pudo aumentar la tanteador en dos oportunidades.

La hinchada que venía de dar el gran respaldo ante Flamengo, hizo notar su disconformidad con el técnico y con un equipo, que en el torneo interno sigue sin dar indicios de mejora, por eso algo debe cambiar, porque hoy por hoy se los ve a Racing y a Gago indefensos en la Liga, como que ya no compiten, solo participan y eso los puede llevar a una peligrosa situación en la tabla y en su relación.

Hasta pronto.

 


viernes, 5 de mayo de 2023

El acertado planteo de Gago.

Temple o carácter son algunos de expresiones que podríamos utilizar para indicar lo que mostró Racing anoche, en un partido de alternativas cambiantes frente al Flamengo de Brasil.

Hasta los 25 minutos Racing había realizado un buen encuentro, con un esquema ordenado, en bloque y sin darle espacios, había controlado a un Flamengo que prácticamente no había inquietado a Arias, pero Hauche, que hasta ese momento estaba rindiendo de buena forma, comete dos infracciones insólitas en menos de un minuto, ganándose dos amarillas y por ende la expulsión, que no solo complicó la estructura del equipo, sino que lo golpeó anímicamente.

Racing que ya había tenido una oportunidad en los pies de Romero que habiendo controlado muy bien un pase de Mura, al querer eludir al arquero que lo atora, no puede darle un buen final a la jugada, pero la expulsión del “demonio” le dio, a un equipo que maneja bien la pelota, más espacios y un sector derecho desprotegido donde Mura debía de lidiar con un tándem de rivales.

Y Flamengo fue volcando el juego por ese lado y estuvo cerca de abrir el marcador en un par de jugadas, mientras que buscaba no desarmarse, no encontraba muchas posibilidades aunque tuvo un tiro libre donde Oroz exige al arquero Santos.

Pero cuando todo daba la impresión de que el primer tiempo iba a finalizar sin goles, un Mura un cruce de Mura, quizás ya cansado, provoca un tiro libre que fue bien aprovechado por Gabigol quien conecta el envío y la pone cerca de un palo donde Arias no pudo llegar.

Si la expulsión había hecho daño, este gol en el descuento de esa primera etapa complicaba aún más las cosas y era todo un enigma como iba a plantear Gago ese segundo tiempo teniendo un hombre de menos.

Pensé que no había que entrar en la desesperación y que había que ubicar a Avilés por un volante y a un delantero rápido por Guerrero, porque el peruano que no tuvo un buen encuentro y se lo veía flojo especialmente en lo físico y si bien hubo cambios en esas posiciones siempre Gago sorprende y por Moreno lesionado envió a Galván para formar una línea de cinco y por Guerrero entró Reniero.

En el segundo tiempo el partido tuvo a un Flamengo que con un hombre de más se hizo dueño de la pelota, pero no hacía daño ofensivamente, mientras Racing respaldado por el impresionante apoyo de su hinchada que contribuyó a que el equipo no sintiera que jugaba con diez, ordenado y con mucha personalidad se fue soltando y adelantando sus dos laterales fue equilibrando un encuentro.

Pero la deficiente actuación del árbitro Valenzuela Sáez, fue caldeando el encuentro porque desde el comienzo parecía tener distintas miradas sobre las infracciones, como por ejemplo lo hizo en la patada de Ribeiro sobre la espalda de Guerrero, que en lugar de ser roja terminó siendo amarilla o como cuando a los 15 minutos de la segunda etapa, un cabezazo de Romero pega en la mano de Wesley y frena la pelota, no quería ni siquiera ir al VAR que intervino, ante la queja grupal de los jugadores de académicos aunque finalmente desestimó la sanción.

La cancha vibraba por el constante aliento de los hinchas de Racing y el equipo que seguía tomando cada vez más confianza, diez minutos más tarde iba a cambiar la historia con un hecho con dos situaciones decisivas, primero Gabriel Rojas va a disputarle una pelota al defensor Wesley cerca del área y este le comete una fuerte infracción, lo que deriva en segunda amarilla con posterior roja y en un tiro libre que Oroz, a partir de ayer la nueva opción junto a Matías Rojas y Piovi, con un zurdazo impresionante la clava en el ángulo a la derecha del perplejo Santos.

Estalló el Cilindro donde hinchas, jugadores y cuerpo técnico expresaban su alegría ante ese empate que a partir de ese momento volvía a poner a Racing a la par de su adversario, tanto en resultado como en jugadores y de alguna manera se hacía presente la ilusión de volver a soñar con el triunfo.

Romero se lesiona y es reemplazado por el chico Saliadarre quien unos minutos después tuvo la posibilidad de su vida, cuando presionando gana ante un corto pase de su rival y enfrenta al arquero, pero su remate, aunque bien intencionado, pega en el palo.

Flamengo ya no reaccionaba aunque sobre la hora un remate de Pereira pasó cerca de arco académico.

Los empates siempre marcan una dirección y para Racing fue positiva, porque mostró el acertado planteo de Gago ya que el equipo volvió a confiar en sí mismo, se mostró concentrado, supo sobreponerse a la adversidad, no se desesperó y entendió como jugar estos partidos, logrando un punto importante que lo afirma como líder del grupo.

Fue emocionante el indeclinable aliento de los hinchas y tanto el equipo como Gago supieron responder a ese estímulo, por lo que ojalá que esta fusión fortalezca el espíritu y sea el comienzo de la recuperación para este averiado Racing, que más que nunca debe sacar a relucir esa fuerza interna para afrontar lo que viene.

Hasta pronto.

domingo, 30 de abril de 2023

Un Racing entregado y un Gago sin respuestas.

Triste presentación de Racing ante Boca, donde la vulnerabilidad y el desconcierto volvieron a ser los protagonistas de un equipo y un técnico que siguen sin encontrarle solución a los problemas.

Un Racing indefenso por donde se lo mire, que da la sensación de no poder bajarse del tobogán en que se encuentra, pero es evidente que en este estado no se puede continuar, donde el desbarajuste futbolístico que muestra el equipo en el campo de juego le facilita el trabajo a los rivales.

Con un juego donde tiene la tenencia de la pelota, que últimamente los rivales le entregan porque saben que ya no tiene la contundencia del año anterior, no solo no provoca situaciones de gol, sino que esos intentos ofensivos sin final, siguen dejando espacios de cincuenta metros a espaldas de una línea de fondo, que defiende mal como lo hizo anoche frente a Advincula, Villa y Merentiel.

Es cierto que perturba y confunde a todos el hecho de ir perdiendo por dos goles a los 6 minutos de comenzado el encuentro, donde un desorientado Piovi en el primero vuelve a introducir la pelota en el área cuando debía cabecear hacia atrás o al córner y en el segundo dejándose sorprender por el ayer extremo Advíncula, pero eso debería haber llevado a Gago a modificar algo tácticamente para que los dos atacantes rápidos de Boca no siguieran contando con tanto espacio y libertad.

Sin embargo nada cambió y siguió confiando en ese juego ofensivo casi inocente, dándole a Boca esos espacios a espaldas de una línea de fondo que achicaba hasta más allá de la mitad de cancha, sabiendo de la lentitud de ellos y de la velocidad de los delanteros boquenses.

Boca después de los dos goles se dedicó a jugar de contragolpe y eso quizás ameritaba cambiar algo en esa primera etapa, ubicando a Guerrero junto a Romero para con lanzamientos largos llevar el juego sobre los centrales rivales, pasando a Rojas al medio por J. Gómez y manteniendo a Mura y Piovi para controlar a Advíncula y Villa.

Se intentó en el segundo tiempo con la entrada de Reniero por Hauche, que hizo un lindo gol y el chico Saliadarre que con personalidad  se esforzó por cumplir una tarea que normalmente no hace por J. Gómez, Oroz que no da ninguna solución lo hizo por Piovi y Pillud que poco pudo hacer por Mura golpeado.

El partido descontrolado por las muchas infracciones terminó perjudicando a Racing por malas decisiones arbitrales que determinaron que Barco y Villa sigan en la cancha y Nardoni sea expulsado.

Y cuando estaba a un solo gol de diferencia, llega la distracción de Insúa y Sigali, quienes marcando en línea en la mitad de cancha, se desentienden de Merentiel, quien en un giro los deja pagando y marca el tercer gol, una acción de terror que sirve para comprender lo que es este Racing.

El equipo está en un peligroso tobogán anímico y físico, mostrándose como un equipo sometido, sin rebeldía, sin líderes y sin reacción que comienza a transitar por el borde de un precipicio, por lo que algo hay que cambiar, porque con estos jugadores va a ser difícil seguir sosteniendo la idea de juego.

Anoche me quedó la imagen de un Racing entregado y un Gago sin respuestas, porque el equipo continúa con su juego improductivo y su técnico se llamó a silencio cuando debió dar la cara y decirle a los periodistas porque este Racing juega cada vez peor.

Por último me pareció lamentable el arbitraje de Merlos, quien debió haber expulsado sin dudar a Barco y por lo menos revisar con el VAR el codazo de Villa a Mura, pero lo que más me molestó fue la encendida defensa de Juan Pablo Varsky respecto del planchazo de marcador de punta de Boca y del codazo del colombiano, la que se acentuó cuando señaló como peligrosa la infracción de Piovi, por lo que parecía que todo debía salir bien para Boca porque se avecina el clásico y los medios deportivos importantes lo necesitan.

Hasta pronto.

martes, 25 de abril de 2023

La confusión está ganando la pelea.

Racing sufrió de local y ante Atlético Tucumán un duro traspié, que me lleva a pensar por el estado de desorientación que muestra el equipo en cada partido, que se ha perdido el rumbo.

Una nueva caída que desorienta y angustia, pero al mismo tiempo confirma el mal momento del equipo, porque este Racing entrecortado en sus líneas, no tiene superación alguna y salvo el primer tiempo frente a Aucas, cada vez exhibe menos nivel y una carencia de ingenio que lo pone al límite de la decepción.

Gago ubicó a Mura, Sigali e Insúa en el fondo, Avilés, Nardoni y Gómez en el medio y como delanteros a Hauche, Guerrero, Romero y el debutante Saliadarre, a priori un equipo ofensivo que trató de encerrar a Atlético en su campo, pero al no tener un buen funcionamiento comenzó a complicarse en la zona de volantes y por consecuencia a desacomodar también a una defensa que se la nota cada vez más vulnerable, otorgándole al rival espacios y facilidades para llegar a enfrentar a un Gabriel Arias, al que por alguna razón se lo ve como desconcentrado, que no solo no nos salva, sino que no responde con normalidad.

Ya no tiene mucho sentido hablar de los rendimientos de cada uno de los jugadores, porque los niveles han decaído de tal manera que es difícil encontrar valores destacables donde todo es forzado, desesperado y realizado sin convicciones, donde la supuesta superioridad es una supremacía ficticia, que se va diluyendo al no encontrar los caminos que lo conduzcan a finales claros y efectivos, dando toda la sensación de ser un equipo mentalmente entregado.

Y el ingreso de varios chicos es una nueva prueba de la desorientación en que se encuentran Gago y su cuerpo técnico, ya que aparece como un manotazo de ahogado buscando una solución, que hasta ahora no pudieron resolver.

Al respecto digo que me causó buena impresión el chico Saliadarre, que no entiendo porque Fernández en la izquierda, donde incómodo nunca desbordó y se limitó a tocar hacia atrás o hacia el medio, mientras que Degregorio no tuvo mucho tiempo para mostrar sus condiciones. 

Es evidente que algo está pasando puertas adentro, porque la confusión está ganando la pelea y en ese complicado estado incluyo al técnico, quien además a mi modesto entender, tuvo expresiones inoportunas al decir que no se puede comparar el equipo actual con el del año anterior, porque se contradice de lo que venía sosteniendo hasta ayer.

Hasta pronto.

viernes, 21 de abril de 2023

El triunfo del juego.

Ante Aucas de Ecuador, Racing mostró en el primer tiempo su mejor versión del 2023, con un juego dinámico, intenso, de tenencia, seguridad en el pase, movimientos y contundencia que me hizo recordar a los mejores momentos del equipo del año anterior.

Con una gran demostración de fútbol Racing prácticamente “bailó” durante 30 minutos al Aucas y le convirtió dos goles de gran elaboración, que no reflejaron la realidad en el resultado ya que debieron ser un par más por situaciones y por un penal no cobrado a Guerrero (golpe en la cara dentro del área) que no fue revisado por el VAR, como si lo hizo en uno anterior por mano y estuvo bien anulado, situaciónes que a mi juicio terminaron desconcentrando un poco al equipo hasta el final de esa etapa.

Hacía tiempo que Racing no jugaba un excelente primer tiempo como el frente a Aucas y nobleza obliga, debo reconocer que Romero fue quizás su mejor jugador esperando que le sirva para ser un punto de partida para su crecimiento y que junto a Guerrero que también lo hizo a un alto nivel, donde resalta su categoría y sapiencia, pueden conformar una dupla importante si son bien acompañados como lo estuvieron ayer, con un Hauche audaz y comprometido, con un Nardoni a quien vi mejor en esa función con apariciones sorpresivas en el área, con un Gómez que se hace fuerte con su habitual gambeta, pero que estuvo más claro y más rápido a la hora de asistir, como en la que le puso a Paolo y que finaliza en el segundo gol y con el chico Aviles que juega cada vez más seguro de sí mismo, le supo dar velocidad y buen destino a sus pases, quienes respaldados por los anticipos de Sigali y Piovi, que jugaban prácticamente en campo rival y Mura y Rojas parecían dos extremos, presionaron y ahogaron de tal manera a Aucas que Gabriel Arias durante ese primer tiempo solo tocó la pelota en un tiro libre desde larga distancia recién a los 35 minutos de esa etapa.

Daba la sensación de que Racing estaba muy seguro, muy bien anímicamente y el segundo tiempo debía continuar con esa presión, aunque obviamente Aucas, como todo equipo que va perdiendo saldría a realizar un juego más ofensivo.

Pero recordaba que muchas veces el año anterior y jugando grandes primeras etapas, Racing comenzaba el segundo tiempo haciéndolo de una forma pasiva que dejaba crecer al rival y lamentablemente volvió a suceder, porque Aucas que salió a pelear físicamente el partido se encontró con un equipo que, como relajado fue perdiendo todas las divididas, como en la jugada del primer gol donde tres jugadores (con todo respeto creo que Sigali no debió ir al suelo), no pudieron con un solo rival que terminó sometiendo a un Arias que me pareció pudo ofrecer más resistencia.

Un tanto que paralizó al equipo y eso quedó demostrado en el segundo gol, donde un centro cruzado desde la derecha y casi desde la mitad de cancha supera a toda la defensa racinguista, que solo mira sorprendida como Davis envía un centro atrás que es aprovechado por Canga para derrotar a Arias y con solo dos jugadas y sin jugar bien empatar un partido que podría haber estado perdiendo por goleada.

El aliento permanente de su gran hinchada despertó a este Racing y la reacción de no se hizo esperar y rápidamente comenzó a adueñarse de la pelota buscando retornar al juego del primer tiempo, pero Aucas ya había armado una muralla en su campo, por lo que no había espacios para armar jugadas con Guerrero y Romero y los centros ante sus altos defensores ya no eran tan positivos.

Entonces Moralez por el chico Aviles (de buen desempeño) para darle más certeza a los pases cerca del área pero a los pocos minutos en una jugada por derecha tira el centro y al caer pisa sin querer al rival y por intervención del VAR sorpresivamente es injustamente expulsado por una acción que es totalmente casual porque al caer el pie si o si debe apoyarlo como parte final de su movimiento, incluso en la imagen se puede observar que Maxi no mira hacia abajo, pero para este árbitro los jugadores deben quedar suspendidos en el aire.

Momento de desesperación y discusiones que sin dudas favorecían a Aucas, mientras para este Racing que había hecho todo muy bien en la primera parte era un castigo demasiado grande que lo llevaba a acumular nervios y a perder serenidad en el juego.

Aucas le oponía un juego físico, buscando alguna pelota al área donde podía hacer la diferencia y entonces Gago a pesar de tener un hombre menos, va en busca del triunfo y envía a la cancha a Insúa, Opazo y Reniero por Guerrero, Hauche y Gabriel Arias, para buscar de todas las formas posibles romper ese vallado, pero ya no había claridad y solo quedaba esperar lo que normalmente sucede en un partido de futbol donde conviven aciertos y errores y finalmente sucedió un error, pero esta vez a favor de Racing, donde un centro de Mura al área es peinado por Ángel contra su arco, al mismo tiempo que su arquero Galíndez salía a buscar la pelota, la que se introduce en el arco y sentencia al equipo ecuatoriano.

El ambiente estaba tan caldeado por todo lo vivido que la locura desatada entre los hinchas por este gol llegó hasta Gago, que al vivir el partido contenido y excitado como toda la gente, dio rienda suelta al festejo y a la emoción.

Fue el triunfo del juego, porque si bien es cierto que había que ganar y sobre todo de local ya que en la Libertadores no hay mucho tiempo para recomponerse en caso de no hacerlo, por el gran nivel mostrado en el primer tiempo y por la búsqueda en el segundo, aun con un hombre menos, no quedó duda que Racing fue superior en casi todo el desarrollo del mismo.

 A NO AFLOJAR ACADEMIA!

Hasta pronto.

 

 

 

 

lunes, 17 de abril de 2023

Un empate que dejó una inequívoca señal.

Racing fue a jugar el clásico a la cancha del vecino y ante un rival invadido por el miedo debió intentar algo más para llevarse el triunfo, pero de a poco y sobre todo en el segundo tiempo, se fue resignando al empate.

Es cierto que el equipo está diezmado, pero el técnico no escapa a la responsabilidad de este desconocido Racing, en el cual es difícil encontrar alguna de las virtudes que el mismo Gago le supo imprimir en la temporada anterior.

Ayer hubo por momentos un esbozo de algo distinto, especialmente con los movimientos ofensivos de Mura, que por lo menos inquietaron a la defensa del rojo (en uno de ellos le cometieron el penal que Matías Rojas ejecutó de gran manera), pero después salvo Sigali, que respondió muy bien, todo fue muy pobre.

El equipo no funciona, defiende mal y genera poco y nada, por lo que necesita de variantes de juego, a mi modo de ver hay que buscarle otras posiciones a Matías Rojas a quien ya le están tomando la mano, darle a Guerrero más compañía utilizándolo cuando el equipo es más ofensivo así le llega más juego y no se desgasta tanto (no está para lanzamientos largos en soledad) y buscar otras opciones en un medio campo donde solo se pudo rescatar la entrega de J. Gómez y el esfuerzo del chico Avilés (por momentos se integró a la línea de fondo) ya que Nardoni continúa con un preocupante bajo nivel en una zona que viene siendo de fácil tránsito para los rivales, sobre todo por la falta de Moreno, pero para la cual no se tienen en cuenta ni Moralez ni Maico Quiroz.

Racing logró un empate que dejó una inequívoca señal y es que Gago sigue confundido, quizás por querer seguir llevando adelante su firme convicción futbolística aún con intérpretes de menor nivel, sin darse cuenta que de esa manera va erosionando su influencia y la confianza en un equipo que en el campo de juego no responde de la mejor forma a su idea.

Hasta pronto.