martes, 29 de octubre de 2013

Por fin Racing pudo sacar el culo del inodoro.


El equipo de Racing venía sufriendo un extraño mal que le ocasionó entre otras cosas una “diarrea” tal,  que no lo dejaba levantarse del inodoro, aparentemente culpa de una rara bacteria que se introdujo en su cuerpo al comienzo del torneo y que fue destruyendo día tras día, todas sus defensas físicas y anímicas.
Varios expertos pasaron y aplicaron sus fórmulas para sacarlo de esta afección que lo iba deteriorando, pero no pudieron recuperarlo ya que su cuerpo no reaccionaba ante sus métodos, quizás porque no descubrieron cual era el germen que lo afectaba , porque no pudieron dar con la receta adecuada o porque ese débil cuerpo no ponía nada de sí para salir del problema.
Mostaza Merlo con sus sistemas para momentos difíciles, esos que ya había utilizado hace unos años en circunstancias parecidas, fue buscado de urgencia para encontrarle la vuelta a este inconveniente que parecía no tener fin, porque había riesgo de que la infección llegara a una septicemia, un proceso de gravedad extrema.
Con su fe intacta, su constancia y sus mínimas palabras expresadas entre balbuceos, comenzó a estudiar la situación y alguna reacción nos hizo imaginar que estaba bien orientado, pero hubo una recaída y la tristeza volvió a nuestros corazones.
Sin embargo este hombre que habla poco seguía confiando en su trabajo, siguió al lado de este “desahuciado” equipo probando fórmulas y preparados que llamaban la atención a propios y extraños hasta que llegó el día en que sorprendió a todos.
Cuando el enfermo en cuestión quiso levantarse del inodoro y caminar, su flaqueza y su debilidad lo hicieron trastabillar y tambaleando volvió a sentarse en su inseparable inodoro que estaba detrás suyo.
Después de un breve descanso y escuchando atentamente a Mostaza, sintió que los colores comenzaron le volvían a su cara y que su cuerpo volvió a tomar energía, lo que le dio confianza para levantarse y abandonar ese lugar del cual no podía salir.
Y entonces lo intentó y pudo dar pasos más seguros logrando lo que no había podido alcanzar durante desde hacía tres meses.
Sí, la diarrea se había detenido y por fin Racing pudo sacar el culo del inodoro.
Pero esto es el principio de una aparente solución a la que hay que seguir controlando para que no haya un abandono de este tratamiento, creyendo que ya todo pasó y que la bacteria abandonó el cuerpo.
Seguramente hace falta tiempo para que la fuerza física y anímica vuelva a recuperarse plenamente, por eso hay que ir sobre seguro para no tener recaídas que puedan llevarnos nuevamente a sufrir consecuencias más graves y que directamente no tengan salida alguna.
Pero este hecho me trajo esperanza y como tengo mucho amor y mucha pasión por este enfermo llamado Racing, digo que hoy estoy feliz y después de mucho tiempo pude volver a sonreír, sonrisa que espero pueda mantener por muchos fines de semana.

Hasta pronto.








sábado, 19 de octubre de 2013

Un equipo adicto a las derrotas.


Cuando uno vive malos momentos siempre anhela un cambio con la ilusión de que todo va a mejorar y los hinchas de Racing que venimos soportando muchas situaciones angustiosas, nos esperanzamos una vez más con la llegada de Merlo.
Tanto es así que lo más importante de la noche fue la presencia de “Mostaza” Merlo, quien evidentemente provocó la convocatoria de mucha de la gente que llegó en buen número al Cilindro.
Porque aunque la pasión por Racing es inmensa, este equipo hace méritos para que cada vez sean menos los que vayan a alentarlos.
Este plantel no está en condiciones de ganar ningún encuentro porque se ha hecho -como dije en notas anteriores- un equipo adicto a las derrotas, lo que los lleva a perderlos mentalmente antes de jugarlos.
La llegada de Merlo nos ilusionaba con ver a un Racing más sólido, pero aún aceptando el poco tiempo de trabajo, el equipo no ofreció nada nuevo y donde admitiendo que hubo más esfuerzo y actitud, -algo que le reclamábamos- todo se quiso subsanar corriendo –sobre todo en el primer tiempo- donde sobresalieron los desaciertos.
Después, un segundo tiempo donde se intentó sin mucha convicción y dándole a Vélez la posibilidad de liquidar el partido si no fuera por Saja.
Racing tuvo alguna pero todo finalizó entre dudas, silbidos y tenues aplausos.
12 partidos y otra vez sopa.
Mostaza deberá buscarle la solución a algunos aspectos como la falta de presencia en el área rival porque es imposible hacer un gol si Vietto baja tanto, aprovechar mejor a Gómez quien las comienza bien y las termina mal y ver que se hace con De Paul de muy bajo rendimiento desde ya hace tiempo.
El equipo está en caída libre y los  jugadores deberían entender que van a ser protagonistas de una historia negra en la que, seguramente nunca soñaron estar, pero de la cual hoy son actores principales.
Todavía la pueden revertir y la solución la tienen ellos, si entienden que no se puede seguir cambiando técnico pensando que la solución del problema está afuera, cuando en realidad se encuentra adentro del plantel.
Pero para eso deben unirse y demostrar que tienen ganas de vivir, confiando en quien hoy se ha puesto al frente para guiarlos,  aceptando sus propuestas y poniendo lo mejor de cada uno, con transparencia y con honestidad profesional.
La confianza mutua más una gran cuota de sacrificio de todos, hará que la convivencia sea más grata lo que les abrirá las puertas a la confianza, a la fuerza anímica y como consecuencia a la claridad mental.
Hoy es tiempo de Mostaza Merlo y el destino dirá si se acertó o no, pero los jugadores deben poner todo para ayudarlo, porque al ayudarlo a él se ayudan ellos


Hasta pronto.








domingo, 13 de octubre de 2013

Un problema de fondo.


Las mismas caras, los mismos jugadores, el mismo equipo.
Sistemas de juego diferentes.
4 técnicos en 11 partidos.
2 puntos, 3 goles a favor, 19 en contra.
Cifras más apropiadas para un equipo amateur de un torneo de barrio, pero que hoy distinguen a este Racing.
Un plantel que está haciendo méritos todos los partidos, para alcanzar el descenso lo antes posible.
Un equipo que ya no nos despierta ningún interés por verlo, ilusionándonos cada vez que cambia el técnico, sin darnos cuenta que quizás el dilema  es otro, porque estos jugadores no respondieron en cancha a ninguno de ellos.
Racing no ha mostrado mejoría en su juego y en sus movimientos, desarticulándose fecha tras fecha, con jugadores que deambulan por la cancha cometiendo errores infantiles, lo que evidentemente no permite avizorar ningún progreso, pero sí vislumbrar un futuro para nada auspicioso.
Llama la atención que todos los jugadores tengan tan bajo rendimiento, lo que permite suponer que Racing tiene un problema de fondo que solucionar -que no es el del fondo de la tabla- y está insertado en la raíz del plantel, en el grupo y que posiblemente tenga que ver más, con una cuestión interna, que con el juego propiamente dicho.
Ningún técnico podrá resolver lo futbolístico, si primero ellos no solucionan ese aparente conflicto que los turba y los tiene desconcentrados, porque los números demuestran que por lo menos, desde el escenario donde actúan los fines de semana no hay respuestas convincentes.

Hasta pronto.








miércoles, 9 de octubre de 2013

¿Paso adelante o paso atrás?


La renovación de Zubeldía nos daba una señal de que no deberíamos preocuparnos por el tema Director Técnico, por lo menos hasta Junio del 2014, pero imprevistamente todo se derrumbó en treinta días y hoy a dos meses del inicio del torneo ya son tres los técnicos que han conducido a este grupo de jugadores (incluyendo al interino).

El lunes, comenzó la tarea más importante para el Sr. Victor Blanco, que a mi entender, dio el primer paso que el tiempo dirá, si fue un paso adelante o paso atrás en su nueva etapa como presidente, al consultar a Ayala, echado del club hace unos días y además  invitar a los referentes del plantel para hablar sobre el perfil de técnico que les gustaría, algo realmente inentendible, con el agregado de que ante una pregunta efectuada a los jugadores sobre el gusto del técnico, para sorpresa de todos, respondieron Zubeldía. (nota de Clarín de ayer).

Digo con todo respeto, como es posible que estos jugadores, que tanto lo respetaban, no lo respaldaron con actuaciones que ratificaran esa preferencia durante el período que los dirigía, logrando nada más que un punto y quedando afuera de la Sudamericana, convirtiéndose de alguna manera en los responsables directos de la salida de Zubeldía.

Se comenta también que en esa charla expresaron que prefieren técnicos jóvenes dejando en claro que, sin dar nombres, ya marcaron la cancha, porque de alguna manera están diciéndoles a muchos de los técnicos que superan los 50 años, que no los quieren.

Ya pasó con Ischia, que según los dirigentes dicen que el plantel no lo entendía, y señalan a Ayala como el responsable de haberlo traído cuando en realidad el manager siempre quiso que Zubeldía se quedara.
Resultado final, técnicos y manager afuera.

En síntesis, una ensalada rusa total donde parece que nadie es culpable de nada, aunque por lo que se está viendo, el plantel está más que comprometido en el tema, ya que en este torneo, lo único que les entregaron a los técnicos que tuvieron, fue un plazo fijo a 30 días.

Es tiempo que el plantel haga una autocrítica severa y se decida a colaborar con el joven y/o viejo técnico que les toque en suerte, respaldándolo con más actitud y más coraje, para que ese plazo fijo que colocan mes a mes se pueda extender a un año.

Digo esto porque, cualquiera sea quien los conduzca, son ellos los que tienen las herramientas para que eso suceda, debido a que serán siempre los jugadores los que pueden cambiar esta estrepitosa caída que hoy, parece no tener piso.

Hasta pronto.


lunes, 7 de octubre de 2013

Rumbo a lo conocido.


Había escrito ayer a la noche que daba la sensación que los jugadores ya no respondían a Carlos Ischia y eso culminó, después de la derrota ante Rafaela, con la renuncia del mismo a la dirección técnica en horas de la madrugada.

Hoy se sucedieron reuniones durante toda la tarde y como siempre sucede la lista de los técnicos que pueden dirigir a Racing es interminable, aunque como todos imaginamos no habrá muchas sorpresas a la hora de la elección, aunque a ciencias ciertas suceden cosas que descolocan al más ubicado.

Los dirigentes que han quedado a cargo del club parecen haber consultado a los referentes del plantel ( Camoranessi, Ortiz y Saja ) sobre cual es el perfil de técnico que ellos prefieren, algo realmente llamativo y que suma confusión al desconcierto que ya existe sobre el tema a dilucidar.

Algo sugestivo –según cuentan voces racinguistas en twitter- fue que Pelletieri y Zucculini no acudieran a la misma, lo que agrega más dudas sobre  la no tan buena relación que existiría entre los integrantes del plantel.

Además, parece ser que habrían consultado –sin ponerse colorados- al ex manager Roberto Ayala, cosa que realmente sorprende ya que fue despedido porque no estaban de acuerdo con su gestión.

La desorientación es muy grande y me llamó poderosamente la atención que ahora los jugadores se hayan decidido por un perfil de técnico similar a Zubeldía, algo que le hubieran hecho saber a Ayala cuando eligió a Ischia y de esa manera se hubieran evitado ciertas consecuencias que hoy se están sufriendo.

La coherencia y la dignidad parecen haber quedado de lado hace mucho tiempo en nuestro querido Racing y realmente no se me ocurre cual podría ser la solución ideal para salir de esta situación que cada día que pasa nos ahoga más y más.

Si es realmente cierto que son los jugadores y no los hinchas los que decidirán que tipo de técnico podría darle a este plantel una inyección anímica y los ponga otra vez en funcionamiento, yo propondría que los referentes acerquen nombres de los que a ellos les gustaría que los dirijan, pero también que se comprometan a hacerse responsables si siguen haciendo una campaña tan desastrosa como la que vienen cumpliendo, abonando la salida del técnico elegido.

Se que esto es una utopía porque nunca pasó, pero si no estaban de acuerdo con Ischia o no lo entendían –algo difícil de aceptar porque en el fútbol no hay tanto misterio- se lo hubieran planteado como hombres que son, y no jugando casi a desgano haciendo sufrir a millones de hinchas.

Este equipo parece un viejo coche que nunca arranca y cuando lo hace se para a los 10 minutos,  y más que un buen mecánico, necesita un cambio de motor porque ya hay piezas muy desgastadas, pero lamentablemente Racing no está en condiciones de hacerlo, por lo que habrá que encontrar a ese hombre que pueda con su experiencia, hacerlo andar aunque sea a los tumbos.
Racing seguramente terminará decidiéndose por tomar el rumbo a lo conocido, porque a pesar de que son muchos son los nombres en danza, pienso que finalmente terminarán eligiendo a alguien que ya conozca el paño de lo que es sufrir y pelear en estas condiciones.

A mi personalmente –y ya lo dije en muchas ocasiones- me gustó la etapa de Ardiles, donde Racing jugaba muy bien, pero estamos muy apremiados y no estoy seguro que se lo respete y se lo aguante si no saca resultados rápidamente.

Porque el miedo nos ha invadido y eso posiblemente no le permita pensar libremente a este nuevo Presidente para que pueda tomar decisiones avezadas en este mandato impuesto por la necesidad y nunca buscado.

Ojalá tengan suerte dirigentes y jugadores en la elección del técnico, porque de ellos depende poder seguir viendo a Racing en Primera División.

Hasta pronto.















Cuando un equipo no sabe lo que busca, no sabe a lo que juega.


Racing se encuentra en un laberinto cada vez más estrecho por el que avanza angustiado, nervioso y confuso, sabiendo que se le hace cada vez más difícil encontrar la salida.
Este equipo que hace mucho tiempo carece de ideas hoy dejó en claro que perdió la confianza en su conductor de grupo, aquel que debe brindarles seguridad en sus conceptos e indicarle cual es el camino.
Esto no quita responsabilidad a los que integran ese plantel, ese grupo y que son los que tienen el deber como profesionales de por lo menos ofrecer, aún en la peor de las jornadas, todo el esfuerzo que puedan, porque todos aquellos hinchas que concurren a la cancha, como los que los escuchamos o los vemos por otros medios, merecemos una respuesta diferente, totalmente opuesta a lo que se vio hoy en el Cilindro.
Peor imposible.
Un equipo desarmado en todas las líneas, inseguro, con jugadores que parecen no conocerse y  que los han citado para una prueba, más comparable a un rejuntado de barrio que a un equipo profesional.
Frágil por donde se lo mire. Sin respuestas en ningún sector. Tratando de sacarse la pelota de encima y con un arquero que ya no logra convertirse en “salvador” y donde sus gritos mueren en si mismo.
Todo se ve alarmante, la falta de referencia en el área, la endebles del medio campo y la inconsistencia de la línea de fondo, nos pintan un futuro sombrío.
El desandar de un Racing desorientado nos está marcando que cuando un equipo no sabe lo que busca, no sabe a lo que juega, por lo que creo que es el momento de replantearse objetivos y responsables para lograr los mismos.
Porque desde que Carlos Ischia asumió el equipo, éste no muestra reacción alguna y se va resquebrajando cada vez más.
Si pasan otras cosas ( comentarios de disconformidad se escuchan en muchas audiciones partidarias ) que se encierren una semana y se digan las cosas de frente, como debe ser.
No hay otra salida.
Deben entender que el club y los hinchas están por encima de ellos.

Hasta pronto.