domingo, 28 de enero de 2024

Lo único claro fueron las declaraciones de Costas.

La derrota me dolió más por Gustavo Costas que por el equipo, porque si había alguien  que necesitaba un triunfo era él.

Pero por dónde empezar, por la honestidad de Costas en sus declaraciones finales o por el mal partido que jugó su Racing, un equipo que no ofreció resistencia en ningún aspecto ante un Unión que los superó en todas las líneas y hasta podríamos decir se lo llevó por delante.

Costas dijo que no hicieron nada de lo que habían ensayado por lo que el mensaje no les llegó a los jugadores o no supieron interpretarlo, pero Costas es el responsable y tendrá que analizar bien donde está la falla, porque lo de anoche fue realmente una desilusión para el hincha.

Ante un Cilindro repleto y eufórico que alentó a más no poder, Racing se mostraba desconcentrado ante  un Unión que lo presionaba y prácticamente lo tenía retenido en su campo, era como si mentalmente los jugadores  estuvieran fuera del partido, tanto que hasta Arias pareció sorprenderse en el gol.

Pero ni eso los despertó, una clara muestra del estado que envolvía a un equipo que mostraba fallas individuales y una llamativa “pachorra” en las marcas y en las disputas de la pelota, dando la sensación de que su estado físico no era el ideal.  

Con una falta total de rebeldía y de actitud ante la derrota, Racing continuaba deambulando por el campo sin pisar el área rival y sin patear al arco, solo se acercó  en dos jugadas aisladas que no comprometieron al arquero Campisi.

Seguramente Costas en el vestuario habrá hecho hincapié en lo que todos pudimos observar, pero los cambios de Rubio y Quiroz por Martirena y Sigali (lesionado) al comienzo del segundo tiempo no llegaban a modificar el trámite totalmente y cerca del cuarto de hora Solari entra por J. Gómez, registrándose minutos más tarde dos hechos que le dieron la posibilidad de empatar, un remate de Rojas en el área al recibir de Roger y un cabezazo de Conti en un tiro libre que Juanfer ejecutó con precisión, pero en ambos casos la pelota se fue apenas desviada.

Las infracciones de Unión estaban a la orden del día y en cualquier detención del juego hasta con lesiones ficticias exageraba haciendo tiempo, lo que llevaba a jugadores como Juanfer a desesperarse y a sumarse cada vez más a lo que buscaba el equipo el equipo santafesino, que iba aprovechando las distracciones para tener otras oportunidades para aumentar.

Esto llevó a Costas a jugarse todo en la ofensiva haciendo entrar a “Maravilla” Martínez por Miranda, por lo que con un medio campo bastante desarmado era imposible generar juego y por lógica todo iba a pasar a lanzamientos largos para ganar la segunda pelota.

Un remate de Roger estuvo cerca y Gustavo Costas ensaya un último cambio reemplaza a un Carbonero que como contenido nunca pudo desbordar a su marcador, (quizás influyó que su grave lesión había sido justo con el mismo rival) por Salas, quien junto con Martínez me causaron buena impresión.

Y sobre el final del tiempo adicionado se da una jugada de saque de banda donde la pelota en el área de Unión y ante un centro de Salas da en la mano de Tanda quien la envía al córner, que es lo que señala Lamolina.

Ante el reclamo de Salas el VAR revisa la jugada y llama a Lamolina, quien se toma varios minutos para ver que hay un claro penal, pero insólitamente señala una falta anterior por un empujón imperceptible y señala tiro libre para Unión.

Final triste para una noche donde las nuevas y espectaculares luces Led iluminaron el Cilindro para ver triunfar a Racing, pero lo único claro fueron las declaraciones de Costas porque el equipo no supo salir de su cono de sombras.

Hasta pronto.

lunes, 22 de enero de 2024

La hora de la verdad.

Con el ahora experimentado Gustavo Costas Racing comienza una nueva aventura y a mi particularmente me generó una gran emoción, no solo por ser un acérrimo hincha de nuestro querido club, sino también porque es una persona transparente por donde se lo mire.

Pero Gustavo sabe que al empezar a rodar la pelota por los puntos, comenzará a transitar un camino arduo, sinuoso, donde además de ser juzgado por lo bien o mal que puede jugar el equipo, los resultados mandan, por eso debemos ser pacientes y darle el respaldo necesario a este hombre que sufre a la par nuestra y solo lleva veinte días entrenando un plantel que se fue desarmando y armando en diferentes tiempos.

En cuanto a las incorporaciones creo que algunas me parecen interesantes y otras habrá que esperar para juzgarlas definitivamente, pero lo que me ocasionó preocupación es que se reforzó más rápidamente de mitad de cancha hacia adelante y no tanto en la línea de fondo, quizás el sector que merecía tener una mejor respuesta porque fue lo que más flaqueó en el equipo del año anterior.

Es cierto que había que encontrarle reemplazo a las salidas de Tagliamonte, Moreno, Piovi, Hauche, Oroz, Romero y últimamente Ojeda, sin contar que Nardoni y Baltazar Rodriguez seguirán el Sub 23 por varias fechas y las lesiones de Sigali ( aunque hoy escuché que comenzó a entrenar con el resto) y Colombo.

De todas, la de Bruno Zucculini pasa a ser la más relevante (aunque debe recuperarse bien de su lesión) por su jerarquía y su condición de ser un hijo de la casa mientras Cambeses, Santiago Sosa, Santiago Solari, Adrián “Maravilla” Martínez, Maximiliano Salas, Conti y Garcia Basso deberán demostrarlo en el campo de juego.

El mercado de pases parece seguir activo para Racing, ya que Urzi estaría cerca de convertirse en el noveno refuerzo y hasta quizás llegue algún otro.

Pero el tema pasa más que nada por la línea de fondo, donde si bien puede llegar a recuperar a Sigali, no podrá contar con Colombo, por lo que para las primeras fechas Costas tendrá que recurrir a Rubio y Quiroz para acompañarlo.

Sin dudas va a ser interesante observar como Gustavo Costas conformará el equipo que además de los nuevos ocho refuerzos cuenta con Arias, J. Gómez, Almendra, Juanfer, Roger, Carbonero, Martirena, Mura, Pillud,  Rojas y un Miranda recuperado (jugó todos los amistosos), lo que no deja de ser una muy buena noticia.

El sábado en el Cilindro llega La hora de la verdad y si bien me gustaría que su Racing juegue un buen partido, me alegraría de sobremanera que gane, no solo para felicidad de todos los hinchas de la Academia, sino especialmente de Costas porque es un racinguista que se lo merece.

Hasta pronto.