El vaso medio lleno o medio vacío.

Lo que nos habían dejado los resultados de los partidos de verano nos permitió volver a ilusionarnos, entusiasmándonos de tal manera que esperábamos la noche de hoy con una emoción que se trasladó al Cilindro y seguramente también al equipo, lo que hizo que Racing comenzara ese primer tiempo muy ansioso y un poco nervioso e inseguro en si mismo, haciendo que ese dominio inicial no tuviera la presión, la seguridad y el juego que había mostrado en los partidos de verano.

Enfrente tenía a un equipo muy golpeado por todo lo que arrastraba institucionalmente, el que buscó en principio cerrarles los caminos a Racing, quien  tuvo que esperar casi hasta la mitad de ese primer tiempo para comenzar a llevar peligro hasta el arco de Montoya, donde Viola por derecha engancha dentro del área y de zurda la hizo rebotar en el palo, después Hauche por izquierda tuvo la segunda.

A todo esto Colón buscaba neutralizar los costados tratando de que la pelota circule por los pies de los defensores de Racing,  pero De Paul estba encendido y comenzó a crecer por su costado habriendo brechas hasta que a los 35 minutos, recibe una pelota por la izquierda, la cruza a la derecha para Villar quien envía un centro y Viola de chilena

–emulando a Francescoli- la clava en el arco dejando parado a Montoya. GOLAZO!!!

Después y casi sobre la hora, un mal saque del arco por parte de Montoya le permite a Hauche hacerse de la pelota y enfrentarlo convirtiendo el segundo, gol que prácticamente sentenciaba el triunfo.

Pero el segundo tiempo arrancó distinto y quizás por lo pesado del campo de juego o el desgaste de esa primera parte, Racing se pasó todo ese período entregándole la pelota a su rival y salvo una jugada de Viola sobre la derecha donde su centro atrás es recogido por Zuculini y su remate –después de eludir a un rival- es desviado por Montoya, el equipo no generó más jugadas de gol hasta casi el final del partido.

Colón había mostrado que las pelotas paradas eran su fuerte y además parecía que Racing – se había retrasado demasiado- hacía todo lo posible para que Colón descontara, que por cierto lo merecía.

Colón viendo la poca respuesta que estaban dando los volantes de Racing en la recuperación y atendiendo que la defensa de la Academia era superada en las pelotas paradas apostó a jugadores más veloces, pero por suerte está Saja quien respondió ante un par de situaciones difíciles, y sobre el final llegó el alivio total, cuando entre Hauche y Vietto roban una pelota y el “Demonio” – esta vez generoso- lo deja solo a Luciano  para que convierta.

Lo mejor de Racing estuvo en Saja -como siempre-, Gómez, Saveljich, De Paul -primer tiempo y Viola, y aunque este partido parece haber dejado más resultado que juego, cada hincha a su manera verá el vaso medio lleno o medio vacío, aunque de cualquier manera siempre es auspicioso comenzar el campeonato ganando, lo que hacía bastante tiempo que no sucedía- permitiéndole a Racing transformar esa angustia del primer encuentro en serenidad, para enfrentar a San Lorenzo en la próxima fecha.

Hasta pronto.