Así no muchachos.
No se puede jugar de esta manera, tengan los problemas que tengan.
Si no lo entienden al técnico o no están de acuerdo díganselo, pero no
pasen este papelón, que lamentablemente da para pensar mal.
Dirán que no es así.
Bueno, demuéstrenlo en la cancha.
Como hincha les pido disculpas y no quiero faltarles el respeto, pero la imagen
de cabezas gachas y brazos caídos, como después del primer gol y sobre todo en
la segunda etapa, eran más para la serie “Walking dead” y no la de profesionales
defendiendo una camiseta, que en el último año y medio la vistió un equipo que
tuvo identidad, carácter, solidez, actitud y espíritu ganador.
¿Dónde quedo todo eso?
La mayoría de Uds. son los mismos que llevaron a Racing al campeonato en el
2014 y nos entregaron un muy buen 2015 y si el que se está equivocando es Sava,
les diría que no es la forma de darle una respuesta, porque los hinchas no nos
merecemos esto.
Y en esto involucro a todo el plantel, a lo que hoy estuvieron y a los que
no jugaron.
Hay cosas que se han visto hoy que no se entienden.
Cuando a Racing le hicieron el primer gol se quebró totalmente y a partir
de ese momento N’ewells Old Boys, que estaba dando muchas ventajas a espaldas
de sus volantes porque venía muy golpeado, comenzó a manejar el partido y ni
hablar después del gol en contra ( lo único que considero una fatalidad) .
El segundo tiempo simplemente fue un paseo, con jugadores sin ánimo, sin
ideas, individualistas en exceso y como llevando en sus espaldas una pesada mochila.
El desgano que se veía era terrible, con rostros que sí muestra la
televisión y que mostraban gestos de hombres entregados, sin fuerza para
remontar el resultado adverso.
Y al técnico, ferviente hincha de Racing que sufrió y lloró por esta
camiseta, espero que se haya puesto “Colorado”…¡pero
de vergüenza! porque este equipo
hasta ahora no muestra nada innovador, solamente se observa desorden, desconfianza
y fragilidad, por lo que espero, como seguramente todos los hinchas de Racing, que
ordene sus ideas, porque hasta ahora en los cambios que busca introducir, solo
se ve confusión y no claridad.
Esto es, como que desarmó un motor que funcionaba muy bien y al querer introducirle
variantes para mejorarlo, no sabe donde colocar algunas piezas, por lo que no
encuentra la forma de hacerlo andar como antes o mejor.
Respeto y entiendo lo de “cada maestrito con su librito”, pero también hay un
slogan que dice que “si la sopa lo está sanando, sopa sígale dando”.
Es decir, quizás lo mejor hubiera sido no tocar tanto el sistema anterior y
con el tiempo ir buscando incorporar las variantes necesarias para darle la
impronta que él desea.
Lo de hoy es como volver al pasado lejano, cuando pensábamos más en no
perder que en ganar y eso puede ser muy peligroso, porque es contagioso y causa
mucho daño.
Y el domingo está el clásico…
Hasta pronto.