Después de ver y asimilar la derrota con Rafaela, donde por
suerte creo que todos entendimos que la Academia había tenido un buen rendimiento,
hoy podemos decir que Racing ha encontrado un equipo y una línea de juego,
porque se mostró convincente, seguro y contundente frente a un rival ordenado y
jugando de visitante.
Confirmando la levantada que nació en el partido con Newell’s
Old Boys, Racing tuvo como pocas veces una línea de fondo sólida, donde creo
que Lollo se ha convertido en su mejor exponente, sin desmerecer el buen
trabajo de Cabral y la mejora de los laterales, sobre todo de Grimi quien fue
el que más sufrió porque Estudiantes eligió ese sector para volcar casi todo
sus ataques, con el agravante de que cuando Centurión acompañaba a los delanteros, era
casi imposible que volviera con fuerza y rápidamente a ocupar un lugar sobre la
zona, aunque lo intentaba siempre.
En el medio hubo un gran trabajo de Aued, quien fue el que
manejó el trámite, acompañado por un Videla, que hace el trabajoi “sucio” y
quien por su temperamento es el que más cerca está de las amarillas.
Mientras Gastón Díaz estuvo sobre la derecha cumplió un trabajo
correcto, coronado por una muy buena asistencia a Milito en el primer gol.
Después ya de marcador de punta por la lamentable lesión de
Pillud, fue reemplazado por Acevedo, quien quizás con el mejor andar del equipo
se está acomodando a una nueva función debiendo reconocerle que ha mejorado su juego,
completándolo con la buena asistencia a Hauche, en la iniciación de la jugada
del tercer gol, que finalmente concreta Bou.
De Centurión solo debo decir que con todas sus falencias para
definir, debe jugar siempre, porque es lo impensado en un fútbol sumamente estructurado
y es un problema permanente para sus marcadores.
Arriba Milito, con su sapiencia y capacidad da gusto verlo
jugar, preocupando siempre a los rivales y además como hoy, abriendo el
marcador con un gol por anticipación.
Y que decir de Bou. Ya no se puede negar que por racha o por
cualquier otro término que piense el hincha, se ha bien ganado la titularidad,
porque este muchacho que salió de entre las sombras, hoy se ha convertido en “el
fantasma del área” por sus apariciones y
por su presencia en la zona de definición, algo que Racing hace mucho tiempo no
tenía.
Después fue el turno de Hauche en un partido que lo pedía a
gritos, viendo la desesperación y los huecos en la defensa “pincharrata”. Y “el
demonio” cumplió.
Tuvo dos intervenciones muy felices. Una como asistidor y
otra como definidor, dos oportunidades que por suerte las concretó en forma
eficiente.
En este momento es duro ver a Hauche de suplente, pero ahí aflora
su grandeza como jugador y como profesional al servicio del equipo, demostrada
en el pase a Bou, cuando esa jugada pudo haberla finalizado él.
Finalmente para Cocca un reconocimiento.
Porque ahora me atrevo a decir ( como titula el programa de
TyC ) ¡HAY EQUIPO!
Que podrá tener altibajos, pero que me parece han comenzado a
creer en ellos mismos y esa fuerza y esa convicción, los puede llevar a ver a
un Racing peleando por lo más preciado, el campeonato.
Ojalá pueda darse, sería algo que los hinchas les reconoceríamos de por vida.
Hasta pronto.