La imagen de un estadio desolado y vacío fue como un presagio de lo que iba a suceder.
Nada más triste que ver una cancha así, pero
que sirvió de fondo a un equipo tan vacío de fundamentos y tan falta de
conceptos que realmente desconcierta.
Sobre todo después
de escuchar y ver en los medios a un técnico que se expresa bien y que se muestra convencido
de sus esquemas, respetables desde todo punto de vista, los que lamentablemente no llegan a plasmarse definitivamente en el campo de juego.
Aceptando que desde
afuera es mucho más fácil criticar, digo que hoy el equipo se mostró
rápidamente superado por un rival que sí mostró capacidad, entrega e
inteligencia a la hora de atacar y defender, mientras Racing una vez que
claudicó por los costados ante una buena marca conjunta de la defensa de San
Lorenzo no tuvo otra idea e insistió con la misma - salvo rotando los jugadores, invadiéndose a medida que
pasaban los minutos de una confusión tal que exasperaba a los propios
jugadores.
La individualidad cada
vez más acentuada mostraba los defectos de este equipo que solo mostró esta
noche las virtudes de Vietto (en el primer tiempo) que le hizo pasar malos
momentos a Cetto que lo siguió por todos lados, pero que nadie utilizó la zona del área que quedaba descubierta por la salida del central del
Ciclón.
La defensa tiene un
problema. Para salir a arriesgar debe achicar y jugar casi en la mitad de
cancha y allí se ven los problemas por ejemplo de Ortiz cuando queda mano a
mano y donde su lentitud queda expuesta en sus movimientos.
Esta línea de fondo
que hoy tiene Racing está para jugar en la puerta del área.
Hay que
aceptarlo sí o sí, porque este equipo se siente cómodo jugando de contra ( un estilo
como juega Arsenal, como jugaba Simeone ) donde puede generar algún peligro si
encuentra espacios cuando recupera la pelota.
Cuando nos
preguntamos porque no tenemos más circulación de pelota sostengo que son muy
pocos los jugadores capacitados para esa tarea y que deben reunir condiciones
como las que hoy tuvieron los volantes rivales ( donde ninguno era un pibe ).
Los chicos de Racing
no están para eso, salvo Vietto. ( Ya no está Fariña ).
Ni Zuculini, ni
Centurión, ni De Paul lo pueden hacer y no es para reprocharles nada, pero recordemos
que los mejores momentos de ellos fue cuando arrancaban con espacio y velocidad
pasando virtualmente por encima a los defensores rivales, quienes utilizaban
todo tipo de golpes para pararlos ( sobre todo a Centurión en el inicial 2012
).
Todo se hacía a mil
por hora, pero admitamos que en muchos de esos goles y de buenas jugadas estuvo
Camoranessi, que era quien marcaba habitualmente el toque final.
Además es lo que
pregona el técnico cada vez que se lo escucha.
Hablar del
rendimiento de hoy no tiene sentido porque todos tuvieron un nivel lamentable, reconociendo
que dejaron todo ante la evidente superioridad que impuso San Lorenzo.
Esta
noche en el Cilindro no hubo gente...y no hubo equipo.
Solamente se vió el esfuerzo
de un Racing desesperado, apurado y plagado de errores. Poco para un plantel con aspiraciones al
título.
De juego, de ideas
claras y de convicciones, nada de nada.
Ahora llega Lanús por
la Sudamericana.
El estadio volverá a
tomar vida y los gritos de los hinchas de la Academia se harán sentir,
para bien o para mal.
Hasta pronto.